La empresa municipal Emaya ha limpiado varias pintadas vandálicas en las zonas del Baluard del Príncep y de sa Feixina, ha informado el Ayuntamiento de Palma.
Se limpian con distintos métodos en función del material de la fachada o muro donde esté hecha la pintada, en unos casos decapando, en otros utilizando agua a presión, y en otras ocasiones se lleva a cabo un tratamiento en la superficie y se pinta encima.
La eliminación de este tipo de pintadas, que finaliza con labores de recuperación de la piedra original, es un trabajo «delicado» y «con un coste de dinero público muy elevado», ha recalcado el consistorio.
La semana pasada, la Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA) acusó al Ayuntamiento de Palma y al Consell de Mallorca de menospreciar el patrimonio histórico por llevar dos años y medio sin limpiar las pintadas del Baluard del Príncep.