El proyecto 'Escudella' ha seguido prestando servicio durante la crisis sanitaria a 241 familias en Palma, a las que ha proporcionado menús para promover una alimentación saludable y de proximidad a alumnos de la ciudad.
El regidor de Educación y Política Lingüística, Llorenç Carrió, ha visitado este martes la Escuela Infantil de Son Roca para conocer el proyecto.
Según ha informado el Ayuntamiento de Palma, se trata de un programa puesto en marcha este curso que también trabaja los hábitos alimenticios de los niños.
Durante la crisis sanitaria, el proyecto ha contado con una aportación de 14.000 euros del Fondo de Urgencia y Solidaridad de la Fundación Carasso. Esta aportación ha permitido cubrir el coste técnico para configurar el proyecto, comprar fiambreras de cristal para que las familias puedan llevarse la comida a casa durante el confinamiento y mejorar los equipamientos de las cocinas.
«Sabemos que la alimentación es una base imprescindible para el correcto desarrollo de nuestros niños, por eso optamos por un cambio integral en la manera de gestionar todos los aspectos relacionados con la alimentación, siguiendo criterios de salud, sostenibilidad y soberanía alimentaria», ha destacado el concejal.
Durante la visita, la nutricionista Maria Blanquer ha remarcado la importancia de una alimentación saludable y sostenible, mientras que el cocinero Ernesto Serrano ha destacado el esfuerzo del personal del Patronato Municipal de Escuelas Infantiles para adaptarse a los cambios producidos en las cocinas con el nuevo proyecto.
Por su parte, Alicia Martínez, representante de la cooperativa Coanegra, ha expresado el interés del proyecto para el sector agrario de la isla y el deseo de que tenga continuidad y sirva de ejemplo para otros administraciones.
En esta visita los asistentes han podido degustar dos de los menús del programa Escudella. En concreto, han probado un plato de lentejas con verduras de temporada, y uno de 'galets' con salsa de zanahoria y pollo y fruta de temporada.