La protesta de las asociaciones de vecinos contra los cambios realizados en las líneas de la EMT de Palma ha sido suspendida este lunes, debido a que la organización no carecía de autorización para llevarla a cabo al no haber notificado la acción a Delegación de Gobierno.
Según ha informado el secretario de la Federació de Veïnats de sa Ciutat de Palma, Tomeu Berga, sabían que el permiso era necesario, pero pensaban que iba a ser una protesta discreta y sencilla, y la convocatoria se ha desbordad. «Durante el fin de semana hemos visto que el tema se nos ha ido de la mano, porque había mucha gente, incluso que no es de nuestras asociaciones, que pensaban participar. Por lo que decidimos suspenderla y solicitar los permisos necesarios y evitar ser multados».
La protesta se vuelve a convocar para el 2 de marzo, día para el que ya han avisado a Delegación de Gobierno. De aquí al día dos, los convocantes confían en poder mantener la reunión solicitada con el concejal de Mobilitat, Francesc Dalmau, y poder llegar a un acuerdo.
Estaba previsto que a primera hora de la mañana arrancara esta protesta de los ciudadanos indignados por la modificación de la red de autobuses de la ciudad, una acción en la que participan la Federació de Veïnats de sa Ciutat de Palma y las asociaciones vecinales de Son Armadans, Es Fortí, Sa Teulera, Amics de Santa Catalina, Es Born des Molinar y Ses Cases Noves des Coll.
El propósito era colapsar en centro de Palma con cerca de 200 coches, más todos aquellos que se quisieran sumar, durante al menos toda esta semana. Los organizadores de esta acción reivindicativa anunciaron que las mantendrían el tiempo que hiciera falta hasta que el Ajuntament de Palma no rectifique en los itinerarios de las líneas 2, 5, 3, 15, 35 y 29, cuyos cambios, han afectado de manera muy negativa a sus barriadas.