Miles de personas acuden al cementerio de Son Valentí y los demás camposantos del municipio desde primera hora de la mañana en un día de Tots Sants soleado y caluroso, bien distinto del año pasado en el que la lluvia acondicionó la jornada.
El cementerio de Palma abrió sus puertas a las 7 de la mañana, cuando ya había personas esperando, y a primera hora no se cortó la circulación rodada para favorecer la movilidad de personas con dificultad.
La comitiva municipal inició el acto institucional a las 10:30, presidida por el alcalde de Palma, José Hila, que estuvo acompañado de seis de sus regidores de los tres partidos del pacto. También acudieron los cuatro ediles de ciudadanos pero se ausentaron todos los regidores tanto del PP como de Vox.
La comitiva se encaminó hacia la Plaça del Record, donde se encuentra el osario general del cementerio, el mayor de Balears, y tanto el alcalde como presidente de la EFM, Alberto Jarabo, depositaron una corona de flores en recuerdo de todas las personas que ya no están con nosotros.
A continuación se guardó un respetuoso silencio mientras Miriam Félix interpretaba el Adagio de Albinoni al violonchelo.
Jarabo reiteró su mensaje de estos últimos días de que la voluntad del Ajuntament de Palma es acercar el cementerio a los ciudadanos como una parte más de la ciudad y como el museo al aire libre que es.
Por su parte el alcalde de Palma reconoció que se trata de una «jornada de recuerdo de las personas que ya no están, una costumbre de muchas familias» y afirmó que «el Ajuntament se quiere sumar a este respeto y a este sentimiento con su presencia hoy aquí».
Varias decenas de ciudadanos presenciaron el acto institucional.
A continuación los representantes políticos se dirigieron, como es tradición, al lugar en que está colocada la Placa de la Libertad, colocada por el Consistorio palmesano en el año 1979 antes de la remodelación del Muro de la Memoria, que se encuentra allí mismo, por lo que se convirtió en el primer símbolo de la recuperación de la memoria histórica.
En este punto el alcalde y el presidente de la funeraria volvieron a colocar otra corona de flores, en este caso amarillas, en recuerdo de las víctimas por la libertad.
La música también puso el toque de solemnidad, en este caso a cargo del grupo Auraveus, que interpretó la canción de María del Mar Bonet Dança de la primavera.
Una vez finalizado el acto institucional, los ediles de Ciudadanos se marcharon mientras que representantes del equipo de gobierno hicieron tiempo para participar en el acto que a las 12 dio comienzo junto al Muro de la Memoria organizado por Memòria de Mallorca.