La Asociación para la Revitalización de Centros Antiguos (ARCA) ha entregado un escrito este lunes al área de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma para que retire las pinturas que han aparecido en la fachada de un comercio en el barrio de Santa Catalina.
En una nota de prensa, la entidad ha advertido que la normativa «no permite colores llamativos en las fachadas de este barrio», por lo que han presentado un escrito para que se «restituya» el paisaje de un edifico de la calle Fábrica.
Según han indicado, en la actualidad hay «muchos comercios de Palma que pretenden hacerse más visibles y llamar la atención con rótulos, luces o colores llamativos». Este hecho, según han explicado, va «en contra de la norma estética de las fachadas y provoca un efecto invasor y perturbador del paisaje urbano».