Diversas entidades se han opuesto este lunes al cambio de iluminación que el Ayuntamiento de Palma prevé en la Catedral y en el Castillo de Bellver y han considerado que dichos cambios «crean un espectáculo 'cinematográfico' que banaliza los monumentos y degrada su valor cultural».
Así se han expresado las entidades ARCA, Palma XXI, Jóvenes Arquitectos de Mallorca (JAM), el Grupo de Opinión de Arquitectos o la Asociación de Vecinos del Distrito Centro en un comunicado difundido este lunes en el que informan de la firma de un manifiesto contra los cambios previstos por Cort y que «pide consenso y reflexión» en la iluminación de los monumentos de Palma.
En este sentido, las entidades han afirmado que los edificios históricos «deben ser conocidos desde cerca, por lo que son y por su arquitectura» por lo que, a su juicio, «el protagonista no debe ser la iluminación sino el monumento». Además, han tachado de «inaceptable» el hecho de considerar la iluminación de la Catedral «ignorando el Palacio Episcopal o la Almudaina y sus alrededores».
Así, han apuntado que la iluminación parecería «un instrumento turístico que banaliza los monumentos» y que «implica su pérdida de identidad». Sobre la utilización de luces LED, las entidades han destacado la reducción de costes energéticos pero han censurado que la «uniformidad lumínica hace perder riqueza arquitectónica» a los edificios.
En la misma línea, han remarcado que la iluminación «intensa» sobre dichos edificios «crea una contaminación lumínica que influye en la imagen de la ciudad histórica» y han criticado los báculos de seis metros de altura ya que «provocan una distorsión paisajística».
Finalmente, han señalado que los monumentos son «una parte importante» del patrimonio de Palma y han considerado que su iluminación «debe contar con un amplio consenso social», por lo que han pedido al Ayuntamiento la «paralización» de el nuevo proyecto de iluminación para establecer «criterios consensuados» sobre la iluminación de edificios históricos de Palma.