Norwegian, una de las cinco aerolíneas sancionadas por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 por prácticas abusivas «se ha puesto en contacto con las autoridades españolas y de la Unión Europea para comprender la decisión tomada, con la que se siente en profundo desacuerdo».
La sanción asciende a 179 millones de euros en el conjunto de las cinco compañías, siendo la más elevada en caso de Ryanair con 107, 8 millones; seguido de Vueling, con 39,3 millones; Easyjet, con 29,1 millones; Norwegian, con 1,6 millones, y Volotea con 1,2 millones.
El ministerio las ha multado por exigir el pago de un suplemento por el transporte de equipaje de mano en cabina, de un sobrecoste sobre el precio del billete por la reserva de asientos contiguos en el caso de menores y personas dependientes y de sus acompañantes y por no permitir el pago en metálico en los aeropuertos españoles.
Se trata de la primera ocasión que se da firmeza a sanciones calificadas como muy graves por parte de la Administración General del Estado en el ámbito de consumo, cuyo ministerio adquirió competencia sancionadora en junio de 2022. Fuentes de la aerolínea de bajo coste han destacado este viernes a EFE que, para Norwegian, «ofrecer viajes seguros y asequibles es una prioridad, y su política de equipaje refleja su compromiso absoluto con este tipo de viajes».
En este sentido, la compañía noruega considera que su política de equipaje «cumple con la normativa de la Unión Europea, y su aplicación es esencial para gestionar las regulaciones de peso y el espacio limitado a bordo». A su juicio, todo ello es primordial «para continuar garantizando la seguridad de sus pasajeros y mantener la puntualidad en sus operaciones».