La secretaria general de ERC, Marta Rovira, espera poder «mover» a Sánchez hacia el referéndum de autodeterminación de Cataluña, pese a la negativa inicial del PSOE, y recuerda que «decía que eran imposibles los indultos y eliminar la sedición», pero ambas cosas han sido conseguidas. En unas declaraciones a Catalunya Ràdio desde Suiza, donde permanece huida, Marta Rovira considera que no es imposible «mover» al PSOE hacia planteamientos como el del referendo, gracias al papel determinante que pueden jugar los catorce diputados independentistas (7 de ERC y 7 de JxCat) en la investidura y durante la legislatura.
Ha pedido, en este sentido, al independentismo en su conjunto a no desaprovechar «la oportunidad» que tiene ahora mismo para «avanzar en la resolución del conflicto político» porque ERC ha comprobado, ha dicho, por la vía de los hechos durante la última legislatura que es posible «mover» a Pedro Sánchez. «Decía -ha señalado- que eran imposibles los indultos y eliminar la sedición», pero ambas cosas han sido conseguidas, ha recordado Marta Rovira, que ha querido lanzar dos advertencias, una dirigida al PSOE y la otra a JxCat. Al PSOE la secretaria general de ERC le ha indicado que «nadie puede dar por descontados» los votos favorables de su partido, puesto que ERC ha puesto encima de la mesa tres condicionantes: seguir negociando el conflicto político entre el Estado y Cataluña, el traspaso de Cercanías y acabar con el déficit fiscal catalán.
Con respecto a Junts, le ha advertido de que una repetición electoral podría tener «consecuencias nefastas» tanto para Cataluña como para el independentismo, a la vista de la pérdida de votos que está sufriendo este último en las últimas elecciones. Ha instado, en este sentido, a los posconvergentes a aparcar «reproches, divisiones estériles, tácticas y partidismos» y a alcanzar «un acuerdo estratégico» que ambas formaciones pueden negociar «con discreción». Fracasar de nuevo en el intento de ponerse de acuerdo podría conllevar, ha alertado Rovira, «un momento duro» para el independentismo con el añadido de que también podría tener como consecuencia «dar alas» al PP y a la extrema derecha.