'Matria' en lugar de patria. La discusión está encima de la mesa desde el pasado fin de semana, cuando la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, usó un concepto que evoca la tendencia del feminismo de nombrar las cosas de forma diferente para lograr una sociedad cada vez más igualitaria.
Este lunes la portavoz estatal de Podemos, Isa Serra, ha defendido el uso del término 'matria' ante algunas voces que la han criticado, y ha opinado que la polémica surgida por el empleo de este concepto refleja en su opinión que la derecha «no tiene capacidad para hacer una oposición mejor».
Díaz se reafirmó este sábado en un mensaje en su perfil de Twitter sobre la propuesta que hizo desde Asturias de cambiar el concepto patria por el de 'matria' recordando que autores como José Luis Borges, Miguel de Unamuno o Virginia Woolf, entre otros, ya lo recogían en sus textos.
Sin embargo, desde el PP no lo consideran algo digno de presentarse en el foco mediático.
También este lunes el líder del PP, Pablo Casado, ha solicitado a la vicepresidenta segunda y ministra centrarse en lo «verdaderamente esencial» y no estar ocupada en «cosas ridículas».
«Patria, no matria como dicen ahora aquellas ministras del Gobierno que se ocupan más de cosas ridículas que de lo verdaderamente esencial», ha recalcado Casado, que ha defendido el «patriotismo constitucional» y una «nación de ciudadanos libres e iguales ante la ley».
El otro gran referente del PP en dar la batalla cultural a la izquierda, la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado que el Gobierno central busca con estos movimientos «perder» a los españoles mientras no define a Cuba como algo «tan sencillo» como una «dictadura».
«Retorcer palabras en beneficio propio es un ejercicio de cinismo», ha remachado Ayuso.
Finalmente, el presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), José Félix Tezanos, también se ha pronunciado sobre esta cuestión y ha defendido que las desigualdades surgidas en España, sobre todo a raíz de la pandemia, hacen que esté apareciendo cierta demanda del Estado 'matria', «cercano y cuidador», frente el Estado «patria», el que «pone orden», y más identificado con la «autoridad».