El viajero español va a suponer el 77 % del total de los turistas que viajen por el país durante la temporada de verano, siempre que se cumplan los planes de vacunación del Gobierno español, según las previsiones de Braintrust.
Por contra, el turismo extranjero sólo supondrá el 23 %, tras aumentar un 50 % respecto al verano de 2020, en pleno azote de la pandemia y aún sin vacunas, aunque para ello también se deberá mantener el ritmo de vacunación y de una desescalada conjunta entre los diferentes países, así como la puesta en marcha del certificado verde digital.
En 2020, el turismo nacional tuvo un peso del 84 % sobre el total de viajes frente al 16 % del turismo extranjero, cuando en años anteriores a la pandemia la relación era del 68 % nacionales y 32 % internacionales.
Además, la consultora adelanta que los viajes de los españoles volverán a ser en su mayoría nacionales, a lugares apartados y naturales y se realizarán en vehículo privado. Así, la playa será el destino preferido (55 %) junto con la montaña (41 %), frente a los destinos urbanos (21 %).
Brainstrust destaca el auge de las ciudades pequeñas enmarcadas dentro de espacios naturales, generalmente de interior, con una amplia oferta cultural y patrimonial.
El análisis también ha clasificado las diferentes comunidades según la estacionalidad de los turistas españoles, con Baleares, Asturias, Comunidad Valenciana, Cantabria, Galicia, Andalucía y Murcia a la cabeza de las más «estacionales».
Por el contrario, Madrid, Castilla-La Mancha, País Vasco, Aragón, Navarra y Cataluña sí que consiguen recibir un gasto por parte del turista nacional más similar mes a mes.