La farmacéutica sudafricana Aspen bajará un 73 % el precio de seis medicamentos sin patente contra el cáncer en Europa después de que la Comisión Europea (CE) haya aceptado este miércoles los compromisos de la empresa, presentados a raíz de una investigación realizada por Bruselas, preocupada por los importes excesivos que aplicaba.
Además, la firma tendrá que garantizar el suministro continuado de esos medicamentos durante al menos cinco años.
«Como resultado de la decisión de este miércoles, Aspen tiene que reducir de manera radical sus precios en Europa para seis medicamentos que son esenciales para tratar ciertas formas graves de cáncer de la sangre, incluido el mieloma y la leucemia. Algunos pacientes, incluidos niños pequeños, dependen de estas medicinas para su tratamiento», dijo en un comunicado la vicepresidenta de la CE encargada de Competencia, Margrethe Vestager.
Añadió que los compromisos de Aspen permitirán ahorrar «muchas docenas de millones de euros» a los sistemas de salud europeos y «garantizarán que estos medicamentos cruciales siguen estando disponibles».
«La decisión de hoy da un fuerte toque a otras empresas farmacéuticas dominantes para que no se involucren en prácticas abusivas de precios para explotar nuestros sistemas de salud», advirtió.
El Ejecutivo comunitario puso en marcha su investigación sobre Aspen y los seis medicamentos libres de patente para tratar la leucemia y otros cánceres hematológicos, de la sangre, en mayo de 2017.
Tras comprar esos productos a otra empresa en 2009, Aspen empezó en 2012 a incrementar sus precios de manera progresiva, «a menudo varios 100 %», en todos los países de Europa en los que los vendía, señaló la CE.
«Beneficios muy altos»
El análisis de la Comisión mostró que, tras la subida de los importes, la farmacéutica ha logrado «de manera consistente beneficios muy altos» derivados de la venta de esos medicamentos en Europa, tanto en términos absolutos como si se compara con los niveles de beneficios de compañías similares en el sector.
Bruselas agregó que los precios «excedían sus costes relevantes en casi un trescientos por ciento de media».
El examen del Ejecutivo comunitario, además, no reveló razones «legítimas» para los elevados niveles de beneficios de Aspen, pues los seis medicamentos habían estado libres de patente durante cincuenta años, por lo que las inversiones en investigación y desarrollo ya se habían recuperado.
«Aspen podía lograr estos incrementos de precios porque los pacientes y médicos no tenían en su mayoría alternativas al uso de estos medicamentos contra el cáncer. Cuando las autoridades nacionales intentaron resistir las peticiones de Aspen para subir los precios, Aspen llegó incluso a amenazar con retirar las medicinas de la lista nacional de medicamentos reembolsables», detalló la CE. Precisó, igualmente, que «en algunos casos» la firma «estaba preparada incluso para retirarlos del suministro habitual en el mercado».
El Ejecutivo comunitario afirmó que las prácticas de la compañía cubrían todo el Espacio Económico Europeo (EEE), si bien no todos los medicamentos se venden en todos los países.
Aspen abordó las preocupaciones de Bruselas con la presentación de unos compromisos que, tras ser ajustados, recibieron el visto bueno de la Comisión este miércoles.
Así, la CE concluyó que los compromisos finales de Aspen ofrecen una solución «rápida, exhaustiva y duradera» a sus preocupaciones.
En consecuencia, Aspen reducirá el precio de los seis medicamentos en Europa, de media, «aproximadamente un 73 %», una disminución que se sitúa por debajo de los importes de 2012, cuando la empresa empezó a aplicar subidas.
Los precios reducidos serán el máximo que podrá aplicar Aspen en los próximos diez años y tendrán efecto de manera retroactiva, desde el 1 de octubre de 2019.
Compromiso a garantizar el suministro de las seis medicinas
En último lugar, la compañía se compromete a garantizar el suministro de esas seis medicinas durante los próximos cinco años y en los cinco años siguientes a ese primer periodo seguirá suministrando los medicamentos o permitirá que otras empresas los vendan.
Esas medidas estarán en vigor una década y la Comisión supervisará que se aplican. Se implementarán en todo el EEE, excepto Italia, donde las autoridades ya actuaron.
Los medicamentos afectados se venden bajo el nombre de Alkeran (pastillas e intravenoso), Leukeran, Purinethol, Lanvis o Myleran, y contienen los ingredientes activos clorambucil, melfalán, mercaptopurina, tioguanina y busulfan.