El obispo de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui, ha negado «ningún trato de favor» al recibir la primera dosis de la vacuna contra la Covid-19, hecho que Sanidad investiga por si se hubiera producido o no de manera irregular, y ha renunciado a recibir la segunda dosis vista la «repercusión mediática».
Desde el Obispado han confirmado en un comunicado que Murgui recibió la primera dosis de la vacuna en la Casa Sacerdotal pero han señalado que lo hizo «sin buscar ningún trato de favor» y «siguiendo la dinámica de las demás campañas de vacunación», debido a su «vinculación sanitaria».
Sin embargo, Murgui ha renunciado a recibir la segunda dosis de la vacuna por la «repercusión mediática causada por la interpretación de este hecho» y por el «bien espiritual de todos los fieles» de la Diócesis de Orihuela-Alicante.
El Obispado ha señalado que Murgui se ha puesto «en manos de la Sanidad Pública» para completar su vacunación «cuando, donde y como determine la autoridad sanitaria».
La Conselleria de Sanidad de la Generalitat Valenciana abrió una investigación sobre la vacunación contra la Covid-19 del Obispo de Orihuela-Alicante y determinar si esta se ha producido o no de manera irregular. La Diócesis negó que el prelado haya buscado «ningún trato de favor sanitario» y aseveraron que «ha cumplido el protocolo prescrito, como en las demás situaciones sanitarias que ha vivido».
Murgui fue obispo de Mallorca. También el actual jefe de la Iglesia en la isla, Sebastià Taltavull, ha protagonizado una polémica vacunación. Taltavull sí se puso la segunda dosis.