La Comunitat Valenciana va a limitar las reuniones sociales y familiares a un máximo de 6 personas, incluso en las fechas señaladas de Navidad, donde ya no podrán ser diez, y adelanta el toque de queda a las 23 horas, con la única excepción del 24 y 31 de diciembre, que empezará a las doce de la noche.
Además, se refuerza el cierre perimetral de la Comunitat Valenciana, de manera que solo podrán venir quienes tengan su domicilio habitual aquí, según ha anunciado este jueves por la noche el president de la Generalitat, Ximo Puig, tras la reunión de la comisión interdepartamental en la que se han acordado las nuevas restricciones.
Puig ha pedido perdón por las molestias que pueda ocasionar la modificación de las medidas que se adoptaron hace doce días, pero ha afirmado que es «inevitable» actualizarlas ante el empeoramiento de los datos: «Es doloroso tener que restringir aún más la movilidad, pero es lo que toca, por prudencia y responsabilidad.