La Justicia francesa decidió este miércoles la entrega a España de José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera, por el sumario de la financiación de ETA a través de las «herriko tabernas».
La sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París comunicó al veterano exdirigente etarra, en libertad condicional, que tiene tres días para recurrir ante el Supremo. Su eventual entrega a España, en todo caso, quedaría diferida a la resolución de los dos casos que tiene pendientes con la Justicia francesa.
La Audiencia Nacional española lo imputó por pertenencia a una organización terrorista por hechos de 2000 y 2001 y podría ser condenado a una pena de nueve años de prisión.
Urrutikoetxea, que acudió a la audiencia con vaqueros, una chaqueta impermeable azul oscuro y una mascarilla blanca, estaba esta vez asistido, además de por sus letrados franceses, por Gonzalo Boye, el abogado de Carles Puigdemont y de Quim Torra.
La sala de instrucción ya dio su visto bueno en enero para la entrega a España del veterano exdirigente terrorista para ser juzgado por el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Zaragoza en 1987.
Josu Ternera, de 69 años, recurrió esa decisión ante el Tribunal Supremo, que debe organizar una audiencia en las próximas semanas, para la que la Fiscalía presentó ayer sus conclusiones.
Está pendiente de resolución en la misma sala de instrucción otra demanda de extradición española contra él por el asesinato de un directivo de Michelin en 1980.
Esa instancia judicial rechazó el 1 de julio la entrega de Urrutikoetxea para ser juzgado por crímenes de lesa humanidad, un delito por el que también lo había reclamado la Audiencia Nacional.