La crisis provocada por la pandemia de la COVID-19 provocará una aceleración en la concentración de un sector hotelero que se encuentra «muy fragmentado», al tiempo que las compañías explorarán fuentes de financiación alternativas y se plantearán operaciones corporativas, según un estudio publicado este viernes por Banca March.
El informe titulado 'Los retos financieros del sector hotelero en el contexto de la COVID-19', que incluye una encuesta a 100 empresas del sector hotelero, concluye que la mayoría de las empresas hoteleras en España está en fase de reactivación, aunque estiman que no recuperarán el nivel de ingresos de 2019 hasta el año 2022.
Obtener liquidez para afrontar los compromisos a corto plazo en un escenario de ingresos nulos, mantener los niveles de solvencia, volver a situar los ratios de endeudamiento en niveles previos a la crisis y mejorar la eficiencia figuran entre los retos más acuciantes de las empresas encuestadas.
Aunque el aumento de la incertidumbre generado por la pandemia ha retrasado las decisiones de consumo de bienes duraderos y de inversión, un 57% de las empresas con planes de crecimiento antes de la crisis los mantienen.
No obstante, según el informe, muchas empresas citan la evolución de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) como una de sus principales preocupaciones, ya que una de las grandes demandas del sector es extender los mismos, como mínimo, hasta el 31 de diciembre.
El estudio también recoge que los retos se afrontan «desde una situación económico-financiera favorable, fruto de la mejora progresiva de su estado patrimonial y de su rentabilidad».
Concretamente, el análisis de los datos muestra que el nivel de endeudamiento en relación con la capacidad de generación de la empresa ha disminuido en los últimos años. Asimismo, se constata la elevada dependencia de la financiación bancaria, ya que el 90% de las compañías solo cuenta con esta fuente y, por el momento, la apelación al mercado «es muy limitada», según el informe.
El estudio identifica una tendencia positiva en la ratio de capitalización de las empresas del sector hotelero, que permitirá al sector «afrontar con mayor solvencia el impacto de la crisis actual y propiciar una recuperación más veloz y menos dramática que la anterior».