El dirigente de Ciudadanos y portavoz adjunto en el Congreso de los Diputados, Edmundo Bal, ha afirmado este jueves que habrá que aumentar el gasto público para superar la crisis socioeconómica derivada del coronavirus, un incremento que su partido propone financiar reforzando la lucha contra el fraude fiscal y revisando algunos impuestos con el fin de elevar la recaudación tributaria.
«De esta crisis vamos a salir con un mayor incremento del gasto público. En inversiones, en incentivos a empresarios y autónomos...», ha declarado en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press.
Según ha explicado, ese aumento del gasto se podría financiar tanto con un incremento de la recaudación tributaria como con deuda pública, aunque esta segunda vía «tiene sus limitaciones» porque la capacidad de endeudamiento del Estado la determina la Comisión Europea.
Bal ha señalado que en las conclusiones que presentó Ciudadanos este miércoles en el seno de la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica del Congreso -con medidas para cada uno de los cuatro grupos de trabajo que han estado funcionando desde principios de mayo-, se hace hincapié en la lucha contra el fraude fiscal, que en España «es muy elevado».
Según el portavoz parlamentario, el documento presentado por Cs en el grupo de trabajo para la reactivación económica apuesta por impulsar reformas legislativas «para incrementar la recaudación, pero tocando lo menos posible los impuestos».
Por ejemplo, Cs plantea revisar el sistema especial de las sociedades de inversión de capital variable (sicav), para que la Agencia Tributaria verifique el cumplimiento de los requisitos para su constitución y se asegure de que son auténticas sociedades de inversión colectiva, no «vehículos de inversión privada de grandes fortunas» que buscan tributar a un tipo del 1% en vez de al tipo general del Impuesto de Sociedades.
También propone reforzar el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales y las Infracciones Monetarias (Sepblac); revisar el delito fiscal para hacer cumplir las sentencias y agravar las penas; y endurecer las multas a las entidades financieras que cooperen con el blanqueo de capitales y el fraude fiscal.
En la misma línea, la formación naranja reclama que se refuerce la independencia de la Agencia Tributaria y se la dote de más recursos, que se constituya una Oficina de Control Fiscal de Grandes Fortunas, que se controle la eficacia de los incentivos fiscales para garantizar que no contribuyen a facilitar el fraude y que se elimine el «opaco» sistema de Entidades de Tenencia de Valores Extranjeros (ETVE).
Un paquete de medidas de lucha contra el fraude fiscal que, según Bal, «impactarían de manera decisiva en el aumento de la recaudación» tributaria.
Cuando le han preguntado por qué el documento de Ciudadanos no aboga por bajar los impuestos, como solía defender hasta ahora, el miembro del Comité Permanente del partido ha respondido que en la comisión parlamentaria han intentado «servir de puente» para que «las fuerzas políticas de un lado y del otro» puedan alcanzar consensos.
En este sentido, ha destacado que Cs inauguró una «nueva política» al pactar medidas con el Gobierno de Pedro Sánchez a cambio de apoyar el estado de alarma y ahora otros partidos «se empiezan a dar cuenta de que esta es la solución y es lo que demandan los españoles».
«Lo que estamos haciendo es obligarles a que se den la mano entre ellos», ha dicho sobre el PSOE y el PP, recalcando que, en la situación «trágica» que vive el país, es «inadmisible» seguir en la «guerra de trincheras».
En cualquier caso, Bal ha reiterado que antes de decidir la política fiscal, habrá que saber exactamente qué ayudas europeas va a recibir España, ya que una parte de esos fondos son condicionados a proyectos y eso «va a impactar de una forma muy notable» en los próximos Presupuestos Generales del Estado.
En su documento, Ciudadanos propone revisar «en profundidad» el Impuesto de Sociedades, «no solo de los tipos impositivos que resultan de aplicación» -aunque no precisa cómo-, sino también del régimen de deducciones, el régimen de exención por doble imposición de dividendos, el uso de bases imponibles, los regímenes especiales y la eliminación de las medidas que desincentivan el crecimiento empresarial de las pequeñas y medianas empresas.
Además, reclama que este tributo sea «ajeno a las susceptibilidades que facilitan la ingeniería fiscal de las grandes corporaciones» y que resulte «más justo y eficiente», para que la recaudación en España se aproxime a la media de la zona euro.
El partido presidido por Inés Arrimadas plantea igualmente una «revisión en profundidad del IVA, tanto de los tipos impositivos que existen», como del régimen de exenciones y los regímenes especiales, pero tampoco da detalles sobre los tipos.
En materia fiscal, también pide «armonizar a la baja el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones» en toda España para que las herencias y donaciones dentro del núcleo familiar no tengan efectos tributarios, y redefinir el Impuesto de Patrimonio, que cree que «debería tener una función eminentemente censal y no recaudatoria».
Por último, Cs propone una armonización regulatoria de los principales impuestos al sector de las nuevas tecnologías, desde el nivel municipal al nacional, y defender el establecimiento de un Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales a nivel de la OCDE o, en su defecto, de la UE.