El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha anunciado este sábado que su partido no asistirá al homenaje a las víctimas de la pandemia de la COVID-19, convocado para el próximo 16 de julio, por considerarlo «una ceremonia exculpatoria» de un Gobierno «criminal».
Durante un mitin de precampaña en el auditorio Mar de Vigo de cara a las elecciones gallegas del 12 de julio, el presidente del partido ha acusado al Ejecutivo de Pedro Sánchez de utilizar a las víctimas como «excusa» para celebrar esta «exculpación» de su gestión «criminal», que se caracteriza por «ocultar la cifra real» de fallecidos.
Además, Abascal ha afeado al Gobierno que «usurpe las funciones de Su Majestad El Rey», quien es, ha explicado, quien debe convocar un acto de Estado al que «no le llaman funeral, porque de funeral no se puede hablar», ha criticado.
Tras criticar también que el Ejecutivo convocase luto oficial a partir del 26 de mayo, «cuando ya habían pasado meses» desde el inicio de la crisis sanitaria y cuando «los españoles ya se vestían de luto», el líder de Vox ha asegurado que «el mejor homenaje» a los fallecidos es «que se haga justicia» contra una gestión «criminal».
«Crispación», la «palabra de moda»
También en la página de política estatal, Santiago Abascal ha bromeado con la «crispación», la «palabra de moda». «Parece que en España no había crispación hasta que llegamos nosotros, qué casualidad», ha ironizado.
«¿Crispación es llevar la contraria? ¿Es decir que no aceptamos el consenso del silencio al que nos quieren condenar?», se ha preguntado, para seguidamente cargar contra el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, por decir «que no va a caer en provocaciones» después de que «dijo al compañero Iván Espinosa de los Monteros que quería hacer un golpe de Estado».
Asimismo, ha culpado a «los señores de Podemos» de las agresiones sufridas por «compañeros» de Vox por toda España. Todos estos actos «de hostigamiento» los ha atribuido «a los matones del señor Pablo Iglesias», quien «ha traído a España los 'escraches'». «Nosotros (Vox) denunciamos y condenamos cualquier tipo de escenificación grotesca que pueda incitar a la violencia», ha manifestado.
«Es conveniente que tengan claro que no vamos a dar ni un paso atrás. Vamos a denunciar sus fechorías, su doble vara de medir y su incompetencia voluntaria», ha añadido Abascal, de lo que se ha servido para criticar que el Estado sea «tan eficaz para unas cosas», como cobrar impuestos y localizar a un hombre «que ha hecho el estúpido en una galería de tiro» --sobre el polémico vídeo de un hombre lanzando disparos a fotografías de miembros del Gobierno--; mientras «no es capaz de desenterrar» a los dos trabajadores del vertedero de Zaldíbar (Vizcaya).
«Distancia infinita» con el Gobierno
Asimismo, Abascal ha cargado contra la postura del Partido Popular y concretamente la de su presidente, Pablo Casado, a quien escucha «tendiendo la mano» al PSOE; y la de su secretario general, Teodoro García Egea, que «se reúne a escondidas con el señor Zapatero, que no es más que un agente del chavismo en España».
«Ellos sabrán qué quieren hacer, pero nosotros no vamos a ir por ese camino. Vamos a estar en la oposición sin cuartel a este Gobierno. (...) Vox va a mantener la distancia infinita con este Gobierno del Frente Popular», ha insistido Abascal.