Desde el pasado 11 de junio el mundo de la cultura está de luto por la pérdida de Rosa María Sardà, una de las grandes actrices de cine y teatro, que recoge un gran currículum a sus espaldas.
Dentro de los homenajes que ha estado recibiendo durante la pasada semana, destaca la de su hermano, Xavier, en su habitual columna del domingo en El Periódico, donde le dedica unas palabras bajo el título Una lectora menos.
«Hoy pido disculpas porque no se me ocurre hablar de ningún otro tema. Sin mi lectora me he quedado bastante solo», avanza. Y añade: «Esta sección tiene una lectora menos. No es una lectora cualquiera. Ha sido una lectora crítica, apasionada y entusiasta».
«De ella he aprendido a decir lo que pienso sabiendo que, por tanto, no es posible gustar a todo el mundo. La verdad es que la falta de mi lectora es irreparable. Creo que hablaré con contabilidad y que no me paguen este artículo. Es un artículo que no lo es», confesaba el presentador de Crónicas marcianas, añade.
El periodista confiesa que tuvo dudas a la hora de compartir la columna: «He estado a punto de decir que esta semana no escribía nada por la falta de mi lectora, y quizá habría sido mejor. Pido toda vuestra condescendencia y comprensión, a pesar de que yo mismo no sé si se las otorgaría a un cronista que adolece de este modo de la falta de una lectora».
«El caso es que este deslavazado texto ella no lo leerá, creo que para mi bien físico. Imagino a mi lectora diciéndome que me deje de historias y de cuentos y que a ver si me pongo en solfa y me dejo de tonterías», continúa Sardà.
También le da las gracias por todos los momentos que ambos compartieron a lo largo de sus vidas y de todo lo que pudo aprender de ella: «Agradezco a mi lectora que me haya enseñado a ver el mundo con su apasionante temperamento y su enorme cultura. Adiós, lectora».
Rosa María Sardà falleció el pasado jueves a los 78 años a causa de un cáncer linfático que no logró superar y que le fue diagnosticado en el 2014. Fue ella quien lo reveló al mundo en una entrevista concedida a Jordi Évole.
«El cáncer es invencible, no es una lucha, es una cuestión de que los que se ocupan de tengan más o menos tino al programar unas ciertas medicaciones o lo que sea, pero no se trata de un match de a ver quién gana, porque el cáncer siempre gana», dijo al presentador de La Sexta.