El Banco de España prevé para este año una contracción económica «sin precedentes» como consecuencia de la epidemia de coronavirus y de las medidas adoptadas para frenarla, que podría alcanzar el 13,6 % si el confinamiento se prolonga durante doce semanas.
En un informe publicado este lunes, la institución analiza el impacto de la pandemia sobre la economía y las cuentas públicas, que se traducirá en una caída del PIB «sin precedentes en la historia reciente» de España y seguida en 2021 de una recuperación «significativa, pero no completa» de la actividad y el empleo que se esperaba antes de la pandemia.
El confinamiento y el cierre de determinadas actividades, explica el Banco, ya ha tenido efectos sobre el empleo y las rentas de familias y empresas, a lo que se une la debilidad del mercado exterior, la interrupción de las cadenas de suministro globales y el «cese» del turismo.
Ante esta situación y a pesar de la incertidumbre que persiste -tanto sobre la duración del confinamiento como las circunstancias que quedarán cuando este se levante, que no espera que sean «de plena normalidad"-, el Banco de España realiza una serie de estimaciones de impacto económico en función de varias metodologías y escenarios.
Con una metodología basada en la oferta, la caída del PIB de este año se situaría entre el 6,6 y el 8,7 % si el confinamiento dura ocho semanas -en función de si la actividad se normaliza tras el confinamiento o a final de año- y en el 13,6 % si dura 12 semanas, un escenario en el que ocio y hostelería no lograrían recuperar la normalidad ni siquiera al cierre del ejercicio.
Con la metodología del Modelo Trimestral del Banco de España (MTBE), más adecuada para medir el impacto a medio plazo y el efecto de las políticas económicas, la contracción se sitúa entre el 6,8 % y el 9,5 % con ocho semanas de confinamiento -en función de si hay empresas afectadas por problemas de solvencia-, seguida de una recuperación del 5,5 % o el 6,1 % en 2021, respectivamente.
En caso de que el confinamiento se prolongara doce semanas, la contracción se elevaría hasta el 12,4 % con esta metodología, que contempla que cierta proporción de las empresas no lograría evitar que su falta de liquidez derivara en problemas de solvencia.
Por lo que respecta a las cuentas públicas, el Banco de España calcula que las medidas adoptadas dispararán este año el déficit hasta un rango de entre el 7 % y el 11 % del PIB, y la deuda pública hasta entre el 110 % y el 120 % del PIB.
Detalla que solo las prestaciones de desempleo y cese de actividad de los autónomos, junto con las medidas excepcionales de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), tendrán un coste de unos 6.000 millones de euros, un cálculo conservador dado que se basa en cifras de afectados que ya han sido superadas.
El Banco de España también ha publicado una encuesta empresarial, que revela que casi el 80 % de las compañías ha visto reducida su actividad por la crisis sanitaria y que dos tercios cree que su nivel de actividad tras el confinamiento será inferior al que tenían antes de la pandemia.
Las razones de esta caída de la actividad son la menor demanda, los problemas de suministros y las dificultades de cobro a los clientes, así como la falta de liquidez y financiación.