El ministro de Consumo y coordinador general de IU, Alberto Garzón, ha destacado que existe una «cohesión extraordinaria» en el Gobierno central en estos momentos y ha asegurado que tendrá «un largo recorrido», pese a que esta semana hayan salido a la luz pública algunas discrepancias que considera normal que se produzcan en un Ejecutivo de coalición. Además, ha defendido que el Gobierno «está demostrando que el más avanzado en defensa del feminismo en toda Europa y en todo el mundo».
Garzón ha participado este viernes en un acto celebrado en Bilbao, acompañado por la candidata a Lehendakari de la coalición Elkarrekin Podemos, Miren Gorrotxategi, y la líder de Ezker Anitza-IU, Isabel Salud, en el que se ha referido a las divergencias entre los representantes gubernamentales de Unidas Podemos y del PSOE en torno a la gestión de la crisis del coronavirus o la Ley de Libertad Sexual.
El ministro de Consumo ha destacado que un gobierno de coalición, «por definición, implica diferencia y gestión de la diferencia», y ha afirmado que también ocurre en los partidos políticos. A su juicio, «lo importante» en un Ejecutivo es que esas discrepancias se puedan «canalizar y redunde en el fortalecimiento del proyecto político».
En referencia a la polémica surgida en torno al coronavirus, después de que la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, recibiera un toque de atención de Moncloa por publicar una guía de actuación laboral en la que afirmaba que las empresas deberán proceder a «paralizar la actividad laboral en caso de que exista un riesgo de contagio», ha destacado que la gestión de esta cuestión recae sobre el Ministerio de Sanidad y a él «se atienen todos los miembros del Gobierno».
En este sentido, ha explicado que la ministra de trabajo ya ha explicado que su Departamento realizó una recopilación de la normativa vigente y se puso en conocimiento público. «Pero subrayo una y otra vez que, ante estas cuestiones que preocupan tanto a la ciudadanía, la voz autorizada es la del Ministerio de Sanidad. Fuera de eso, el Gobierno no tiene nada que decir porque no debemos confundir a la ciudadanía», ha insistido.
Pese a las divergencias que han salido a la luz esta semana en el seno del Ejecutivo, Alberto Garzón cree que no está en riesgo la estabilidad, sino que, «al contrario, tienen que enriquecer». Tras reiterar que las discrepancias son «consustanciales al Gobierno de coalición», ha considerado que la novedad ahora ha radicado en que «algunas han trascendido al ámbito público».
«Es lógico que cualquier iniciativa legislativa del Gobierno sea presentada primero al resto de miembros del Gobierno, y todos los ministerios y departamentos hagan sus aportaciones y sus alegaciones, pero esto ocurre hasta en la Ley más simple. Lo que ha ocurrido diferencialmente, en este caso, es que algunos de esos elementos se han hecho públicos. Pero no pasa nada», ha reiterado.
En su opinión, las organizaciones que conforman el Ejecutivo, Unidas Podemos y el PSOE, lo están haciendo «bien» y comparten «un proyecto político», aunque pueda haber «matices». «Algunas veces saldrán hacia fuera y otras veces se quedarán dentro», ha añadido.
Garzón ha asegurado que él «nota una cohesión extraordinaria» en el Gobierno en este momento y ha aventurado que va a ser un Ejecutivo de «largo recorrido» porque «hay un convencimiento social en este país de que ambas formaciones tienen que trabajar conjuntamente».
Durante su intervención, el ministro de Consumo ha apuntado que, en ocasiones, se tiene «la tentación observar demasiado de cerca los árboles y perder la visión del bosque». «En un momento en el que hemos tenido en nuestro país tantas elecciones, a veces, corremos el riesgo de repetir una y otra vez ese tipo de comportamientos actitudes», ha subrayado.
Por ello, ha llamado a ser «conscientes del momento político» que se vive, incluso en el ámbito internacional, cuando se ve que «la desigualdad entre ricos y pobres se dispara, que las desigualdades entre hombres y mujeres siguen consolidándose, que la precariedad asola a la sociedad o que, desgraciadamente, crecen posiciones, proyectos políticos xenófobos, racistas, de extrema derecha, por todas partes».
El líder de IU ha asegurado que no entiende la polémica generada en torno al hecho de que los integrantes del PSOE y de Unidas Podemos en el Ejecutivo puedan acudir por separado a la manifestación del 8 de marzo.Tras recordar que él irá como ministro, coordinador de Izquierda Unida y miembro de Unidas Podemos, ha asegurado que estará en la marcha con todos sus miembros de su coalición, pero también con sus compañeros de Consejo de Ministros.
«Compartimos las reclamaciones, las reivindicaciones del movimiento feminista. Pertenecemos al mismo Gobierno, que está demostrando que es, probablemente, el más avanzado en materia de defensa del feminismo en toda Europa y en todo el mundo», ha subrayado. En todo caso, ha apuntado que, para evitar cualquier tipo de polémica, saludará «a todo el mundo».
Alberto Garzón ha apuntado que el Día de la Mujer no solo es el 8 de marzo, sino que hay que trabajar por el feminismo «todos los días» y en «todas las dimensiones de la vida». En este sentido, ha recordado que su Ministerio pretende erradicar la publicidad sexista en el ámbito de los juguetes.
«Esto puede parecer un elemento modesto, pero es de una enorme importancia porque la publicidad de los juguetes dirigidos al público infantil introduce una diferenciación de género que reproduce las diferencias que, después, se manifiestan en otros ámbitos», ha añadido.
A su entender, no se puede consentir que, cuando llega la Navidad, por ejemplo, los regalos de «cocinitas sean para las mujeres y los juegos deportivos para los varones». «Una sociedad que se construya con valores de igualdad tiene que ser capaz de ofrecer mensajes que no reproduzcan la desigualdad de género», ha aseverado.
Por ello, cree que, aunque esta medida «puede ser modesta, tiene una significación muy profunda» porque los niños son los que «empiezan a absorber los valores que después se van a seguir defendiendo y reproduciendo en el tiempo».