Iñaki Urdangarin disfruta de su primer permiso penitenciario de cuatro días, desde que a las 8.40 minutos de esta jornada de Nochebuena ha abandonado en un coche el Centro Penitenciario de Brieva, en Ávila, donde ingresó el 18 de junio de 2018.
Desde entonces el cuñado del Rey cumple una condena de 5 años y 10 meses de prisión por malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias en el conocido como caso Nóos.
Urdangarin ha sido recogido por el mismo vehículo en el que cada martes y jueves, desde el pasado septiembre, realiza el trayecto entre Ávila y Pozuelo de Alarcón (madrid) para realizar labores de voluntariado en una ONG de atención a personas con discapacidad.
El vehículo, de color gris, ha llegado al interior del recinto penitenciario a las 8.32 minutos, para después acceder a la propia cárcel por la puerta principal y recoger en su interior al marido de la infanta Cristina.
Ocho minutos después, a las 8.40 horas, ha salido del interior del recinto en la parte trasera del mismo vehículo, en dirección a Pozuelo de Alarcón, donde tiene previsto acudir, como cada martes y jueves desde septiembre, antes de pasar los próximos cuatro días con su familia.
El exduque de Palma tendrá que volver a este centro penitenciario de mujeres antes de las 8.40 horas del próximo sábado.
Iñaki Urdangarin solicitó este permiso penitenciario a finales del pasado mes de noviembre, una vez cumplida una cuarta parte de la pena.
Aunque inicialmente solicitó siete días de permiso, el máximo que contempla la ley, finalmente la Junta de Tratamiento de la prisión lo redujo a los cuatro que disfruta a partir de este martes.