El conseller de Interior, Miquel Buch, ha agradecido este sábado el cordón de separación entre manifestantes y cuerpos policiales que han efectuado en algunas protestas grupos pacifistas, pero ha pedido que se aparten de inmediato si empiezan los incidentes.
Este viernes en Lleida y este sábado en Barcelona, grupos de personas, entre ellos de la plataforma «En pie de paz», se han interpuesto entre manifestantes y policía, con chalecos blancos y apelaciones a la calma, para tratar de evitar que se reproduzcan los disturbios de los últimos días en las protestas en Cataluña por la condena a la cúpula del procés.
Formando un cordón de separación, con los brazos en alto y sentados en el suelo, estos ciudadanos reclaman la no violencia. «Queremos agradecer su actitud. Su contribución para separar actos violentos de las manifestaciones que están sucediendo», ha indicado el conseller.
Buch ha advertido, no obstante, a los ciudadanos de que integren estos cordones de que si ven que se empieza a producir lanzamiento de objetos o actuaciones violentas se aparten lo antes posible del lugar para poder garantizar su integridad física.
«Agradecemos que el pueblo catalán demuestre su carácter pacífico, que actúa cuando ve la cara de la moneda que no es la nuestra (la violencia), que no es la cara del pueblo catalán. Pero si hay lanzamientos o ataques a las líneas policiales, que se aparten», ha afirmado.
Buch, que ha insistido en su petición de «aislar» a los violentos, ha lamentado que durante esta semana hayan resultado heridos policías, manifestantes y periodistas en los «episodios» de violencia que se han registrado.
Ha afirmado además que los Mossos d'Esquadra deben de actuar respetando los principios de proporcionalidad, oportunidad y congruencia y que, si se detecta algún caso en que no es así, el cuerpo autonómico es el «principal interesado» en que estos episodios no se vuelvan a producir.