La brecha entre Cs y Vox, y la negativa de Albert Rivera a reunirse con Santiago Abascal, aviva el peligro de una repetición electoral en Madrid y también en la Región de Murcia, pese al acuerdo alcanzado por el PP y Cs para gobernar juntos en ambas comunidades.
No va a haber foto de Abascal y Rivera sentados en una misma mesa, han dejado claro fuentes del partido naranja, que no tienen reparos en apuntar a una repetición electoral en ambas comunidades para salir del atolladero y probar si sale otra aritmética más favorable a sus intereses.
No obstante, Ciudadanos ofrecía una reunión 'in extremis' de sus equipos negociadores autonómicos con Vox en Madrid y en Murcia.
La primera en Madrid ha acabado sin acuerdo a pocas horas de que se celebre un pleno de investidura sin candidato.
Así lo ha reconocido el portavoz de Cs en la Asamblea de Madrid, Ignacio Aguado, que ya ve «probable» repetir las elecciones tras no haber arrancado que Vox apoye la investidura de la 'popular' Isabel Díaz Ayuso.
Pese a ello, la portavoz de Vox, Rocío Monasterio, ha celebrado que Cs haya aceptado sentarse a negociar con ellos, lo que ha considerado como un «primer paso» para poder llegar a un acuerdo de gobierno en la Comunidad de Madrid.
En Murcia, donde Vox ha tumbado por dos veces la investidura de Fernando López Miras, la reunión está prevista para este jueves.
Esta reunión a tres que Cs ha propuesto en Madrid y Murcia no es una negociación, según justifica la formación naranja, sino una cita para explicar una vez más al partido de extrema derecha las bondades del acuerdo firmado con el PP.
De momento, el partido de Abascal mantiene la presión sobre Ciudadanos, que sigue buscando vías secundarias para eludir que Rivera se retrate con Vox y mantener también el compromiso de la dirección de no negociar gobiernos con ellos.
Cs se escuda en que las negociaciones las llevan los equipos autonómicos y en que Rivera, que ha pedido a Vox que entre en razón, nunca ha intervenido en este tipo de conversaciones.
Mientras tanto, el líder del PP, Pablo Casado, y el de Vox, sí se han entrevistado en el Congreso y ambos han concluido que siguen avanzando para desbloquear la situación en estas dos comunidades, aunque ninguno ha concretado en qué consisten.
El propio Casado confía en que la semana próxima su partido pueda cerrar acuerdos con Cs y Vox para la investidura de Isabel Díaz Ayuso en Madrid y la de Fernando López Miras en la Región de Murcia.
De momento, a menos de veinticuatro horas de que se produzca el pleno de investidura sin candidato en la Asamblea de Madrid, lo único que hay es el «no» rotundo de la portavoz de Vox, Rocío Monasterio, a apoyar una hipotética candidatura de Ayuso.
Este pleno de mañana serviría para poner en marcha el contador para celebrar nuevas elecciones si el 11 de septiembre no hay gobierno autonómico.
Más allá de Madrid y Murcia, el tablero de los pactos tiene también otros frentes abiertos y que giran en torno al PSOE, por ejemplo en Navarra, donde ya hay un preacuerdo de programa que los socialistas han negociado con Geroa Bai, Podemos e IU el cual, para salir adelante, necesitaría tres abstenciones, que podrían ser las de EH Bildu, aunque también las de Navarra Suma (UPN,PP y Cs), como apuntó María Chivite, virtual candidata a la presidencia foral.
Aragón está muy atascado, en este caso porque el presidente en funciones, Javier Lambán, no acepta las exigencias de «sillones» que le plantea Podemos.
Otro de los escenarios estancados es el de La Rioja, donde este martes se ha fijado el pleno de investidura de la candidata socialista al Ejecutivo, Concha Andreu, para el 15 de julio, aunque sin tener los apoyos necesarios para poder salir adelante.
Hay un acuerdo programático entre el PSOE e IU, pero necesitan a Podemos para prosperar y, de momento, los morados no han dado su sí por lo que también planea una repetición electoral.