El ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, quitó hierro este jueves a la reacción que tuvo de levantarse en medio de una entrevista con un medio alemán que le interpeló sobre dirigentes catalanes presos, y aseguró haber tenido «bastante paciencia».
«Yo creo que es no para tanto, ¿no?. Creo que bastante paciencia tuve», explicó en unas breves declaraciones a la prensa sobre la controvertida entrevista, al llegar hoy a la Cancillería ecuatoriana en Quito para participar en un encuentro internacional sobre Venezuela.
Aunque difundida el miércoles, el canciller español concedió la entrevista al programa Conflict Zone de la televisión alemana Deutsche Welle la semana pasada.
Durante el programa, hizo parar en dos ocasiones la grabación tras expresar su indignación al periodista, al que acusó en varias ocasiones de hacer preguntas «sesgadas».
La entrevista, grabada en inglés en la sede del Ministerio español de Exteriores, fue suspendida al cabo de diez minutos de preguntas sensibles sobre el proceso independentista en Cataluña y la situación de los políticos presos.
En una suerte de reflexión a raíz del revuelo causado por la entrevista, Borrell comentó que «probablemente no hubiera tenido ni siquiera que darle la oportunidad de continuar la entrevista en una segunda parte» al entrevistador.
Añadió que «a esta clase de personajes hay que pararles los pies».
Borrell llegó hoy a Quito para una visita de tres días que ha iniciado en la II Reunión del Grupo Internacional de Contacto (GIC) para Venezuela.