El PP y Ciudadanos (Cs) avanzan en las negociaciones y barajan concretar esta semana el pacto para el nuevo Gobierno en Andalucía, antes del que el viernes se conozca la fecha de la investidura, un acuerdo que no tiene intención de modificar la formación naranja para contentar a Vox.
La advertencia de Ciudadanos la ha planteado su secretario general, José Manuel Villegas, quien ha avisado de que su formación no está dispuesta a cambiar «ni una coma» del pacto de gobierno en Andalucía para «contentar» a Vox, al PSOE o a Adelante Podemos.
En una entrevista en Antena 3, Villegas ha remarcado que el acuerdo, 90 medidas «cerradas» que el partido ultima con el PP, es fruto de la negociación con el PP y que Ciudadanos no va a modificarlo ni por «exigencias» de Vox, ni del PSOE ni de Adelante Andalucía.
«El acuerdo programático está prácticamente cerrado y se ha avanzado mucho» en lo que toca a la estructura de gobierno, en la que cree necesario «un reparto equilibrado», por lo que ha augurado que podría estar listo en cuestión de «pocos días».
La negativa de la formación naranja a cambiar el acuerdo con el PP se produce tras el intento de Vox de modificar la ley contra la Violencia de Género y un día antes de la reunión que mantendrán los populares y el partido de Santiago Abascal.
El secretario general del PP, Teodoro García Egea, y su homólogo de Vox, Jaime Ortega Smith, intentarán avanzar mañana en un acuerdo para la investidura del candidato popular Juanma Moreno.
El encuentro será en Madrid y, según García Egea, el PP está dispuesto a modificar la ley de violencia de género en el Congreso, una de las reclamaciones de Vox en Andalucía para dar su apoyo.
El número dos del PP ha metido presión al sostener que «la única esperanza de Susana Díaz de seguir al frente de la Junta se llama Vox» porque la política socialista volvería a gobernar si no dan su apoyo a Juanma Moreno en la investidura.
Vox ya ha manifestado que sentarse a hablar es «un paso importante» para facilitar el cambio en Andalucía, con el que asegura que su partido está comprometido, y espera que Ciudadanos también acuda a este encuentro, extremo de momento poco probable.
A espera de la reunión de Madrid, el PP y Ciudadanos aceleran y apuran en Sevilla el reparto del nuevo Gobierno para cerrar el pacto antes de este viernes, día en el que se conocerá la fecha de la investidura del próximo presidente de la Junta de Andalucía.
De «insulto» a la autonomía andaluza ha calificado el portavoz del PSOE-A, Mario Jiménez, el hecho de que se esté negociando el futuro gobierno autonómico «en Madrid», lo que ha atribuido a la «escasa valía y dignidad» de Juanma Moreno (PP) y Juan Marín (Ciudadanos).
Jiménez ha defendido que Susana Díaz, candidata socialista a la Presidencia de la Junta, opte a la investidura por ser la que cuenta cuenta con «más legitimidad» al haber ganado las elecciones andaluzas y cree que son posibles «otros escenarios que den el poder a la ultraderecha española».
El PP y Ciudadanos tiene previsto cerrar esta semana los flecos del pacto de gobierno en el que reducirán el número de consejerías y de delegados territoriales en las ocho provincias, con la intención de «adelgazar» la estructura política de la Junta y de buscar una administración «más eficaz, más ágil y sin costes innecesarios».
La pretensión es dividirse al 50 por ciento el número de consejerías, con la Presidencia para Moreno y la Vicepresidencia para el líder de Cs, Juan Marín, pero a partir de ahí tienen se negocia el reparto del resto de competencias.
Los dos partidos quieren que se reduzca el número actual de consejerías (13), por lo que serían diez (5 para cada uno) u once (6 para PP y 5 para Cs), además de la Presidencia y la Vicepresidencia.
Se prevé que el área económica también se divida, presumiblemente con Hacienda para el PP y otra consejería económica para Cs, al igual que las competencias en Sanidad y Educación, que recaerían una en cada partido.