Òmnium Cultural ha denunciado un ataque a su sede central con pintadas de esvásticas nazis, unos hechos que han recibido la condena de diversos dirigentes, mientras que esa entidad advierte de que «a pesar de los ataques de la intolerancia más extrema» seguirá siendo «profundamente antifascista».
La entidad independentista -cuyo presidente, Jordi Cuixart, se encuentra en prisión preventiva en el marco del juicio del proceso soberanista- ha difundido varias imágenes de dicho ataque a través de Twitter, donde se ve la fachada y la puerta principal de su sede nacional pintada con ocho esvásticas rojas, símbolo del nazismo.
«A pesar de los ataques de la intolerancia más extrema, en Òmnium hoy y siempre seguiremos trabajando para la defensa de los derechos y de las libertades de todos. No pasarán», ha escrito la entidad en un mensaje en dicha red social.
También el vicepresidente y portavoz de Òmnium, Marcel Mauri, ha difundido las imágenes de dicho ataque. «Así hemos encontrado la sede nacional de Òmnium esta mañana. Pues sí, seguiremos siendo profundamente antifascistas, comprometidos con los derechos y las libertades. Y a pesar de que algunos lo querrían, nunca conseguirán silenciar nuestra voz», ha advertido el dirigente.
Desde la Generalitat, el vicepresidente catalán y conseller de Economía, Pere Aragonès (ERC), ha expresado en Twitter «todo el apoyo» a la entidad. «Orgullosos de ser los enemigos del fascismo. ¡No pasarán!».
El presidente del Parlament, Roger Torrent (ERC), ha considerado que «ante la intolerancia y la banalización del nazismo encontrarán una sociedad abierta que ama la libertad. Todo el apoyo a Òmnium».
Los hechos han sido condenados también por el expresidente catalán y líder de JxCat, Carles Puigdemont, quien ha lamentado que «ataquen porque les molestamos. Les hemos quitado la careta y hemos enseñado su cara autoritaria al mundo. Por eso no quieren ni Òmnium, ni Asamblea Nacional Catalana, ni CUP, ni CDR, ni ERC, ni PDeCAT, ni JxCat, ni la Crida Nacional, ni Generalitat. ¡Todo el apoyo!».
Por su parte, el líder del PSC, Miquel Iceta, ha «condenado rotundamente las acciones intimidatorias contra la sede de Òmnium» y ha recordado que «todas las agresiones, todas las violencias, todas las intimidaciones merecen la repulsa de todos los y las demócratas. Exigimos respeto como requisito de nuestra convivencia en libertad».
Desde Units per Avançar, su secretario general, exconseller de Interior y actual diputado adscrito al grupo socialista, Ramon Espadaler, ha «condenado y rechazado la agresión sufrida por Òmnium», avisando de que «ninguna expresión intimidatoria puede ser tolerada en una sociedad democrática».
El teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y dirigente de los comunes, Jaume Asens, ha criticado que «cuando los independentistas hacen puntadas son un ataque gravísimo a la democracia», pero «si las hacen los nazis, se hace el silencio entre aquellos que no condenan el franquismo».
Como también la diputada de Catalunya En Comú-Podem, Elisenda Alamany, ha dado «todo el apoyo a Òmnium ante el ataque recibido a su sede esta madrugada. ¡No pasarán!».
La concejal de la CUP en Barcelona Eulàlia Reguant ha defendido por otro lado que «hoy Òmnium es la primera línea de la trinchera antifascista. ¡Todo el apoyo a los compañeros y compañeras de la entidad!».