La manifestación periódica que pensionistas realizan en los últimos meses en los alrededores del Congreso de los Diputados ha derivado este miércoles en momentos de tensión ante la negativa de la Policía a permitir que los manifestantes subieran hasta la puerta de los Leones, ya que estaba reunido el Pleno.
Los pensionistas han intentado en varias ocasiones derribar las vallas de seguridad de la Carrera de San Jerónimo, y en algún momento lo han conseguido, pero los agentes antidisturbios han conseguido colocarlas de nuevo en su lugar e impedido que los manifestantes avanzaran hacia el Congreso.
Este miércoles está reunido el Pleno del Congreso y por ese motivo no se permiten manifestaciones en la sede parlamentaria. Sin embargo, los pensionistas, respaldados por diputados de Podemos, consideran que no hay razones que justifiquen que no puedan llegar a las puertas de la Cámara, como en ocasiones anteriores ha ocurrido. PABLO
Pablo Iglesias
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha salido del palacio del Congreso para mostrar su apoyo a los manifestantes, a los que ha aplaudido mientras se acercaba al punto en el que los retenía la Policía. A pesar de los intentos de mediación de los diputados 'morados' con la Policía, los pensionistas no han conseguido avanzar un milímetro y han permanecido confinados en el cruce de la Carrera de San Jerónimo con Marqués de Cubas.
El diputado de Podemos Alberto Rodríguez se ha quejado de la actitud de la Policía y ha considerado «inadmisible» que no se permita a los pensionistas protestar a las puertas del Congreso bajo un Gobierno socialista.
Los agentes han trasladado a los diputados 'morados' que por motivos de seguridad no iban a permitir a los pensionistas avanzar un paso más.
«¡PSOE, PP, la misma mierda es!», «¡No se ven diputados del PSOE"!, «¡No somos terroristas, somos pensionistas!» y «Queremos la pensión del padre del Borbón», han sido algunos de los lemas más coreados por los pensionistas, que en algún momento han arrojado objetos a los agentes e intentado pegarles con sus bastones. Los manifestantes defendían también «romper el Pacto de Toledo» y jaleaban al líder de Podemos: «¡Pablo, Pablo, presidente"!.