El propietario del restaurante Nova Fontblanca de Balaguer (Lleida) ha pedido este miércoles disculpas por la polémica generada por el nombre de dos de sus platos y ha asegurado que cambiará su nomenclatura para no ofender a nadie, a la vez que ha denunciado haber recibido insultos y amenazas por este hecho.
El restaurante, situado en el polígono industrial Camp Llong de Balaguer, ofrece en su carta de desayunos y menús platos como «Guardia Civil andaluz a la brasa de carbón con pan torrado y ensalada de payés» y «Manos de jueces y fiscales del Constitucional hechos a baja temperatura y acabados a la brasa de carbón».
En relación con el primero de los platos, el propietario del restaurante, Toni Punyet, afirma que «se trata de una expresión culinaria típica catalana» y que se refiere a dos arenques curados con sal gruesa.
«Dado que se trata de un producto importado originario de Huelva y que antiguamente solo se vendían de dos unidades en dos unidades y tenían un aspecto rígido y seco, la cultura popular catalana les denominó 'un guardia civil andaluz'», explica el cocinero, que afirma que por este motivo recuperó «esta expresión popular para denominar el plato, que consiste en un arenque salado a la brasa».
Respecto al segundo plato, el de «Manos de jueces y fiscales del Constitucional hechos a baja temperatura», Punyet señala que pensó que podía resultar «una forma divertida» de bautizar un plato típico de las tierras de Lleida.
«Nunca se pensó que esto podía ocasionar ningún tipo de agravio ni menosprecio hacia nadie y, dada la desproporcionada reacción que ha ocasionado, entendemos que es una denominación que hay que sustituir de forma inmediata», dice el propietario. «Fue una forma de hacer una gracia», insiste hoy en declaraciones a Efe Punyet, que recuerda que en la cocina tradicional española existe el plato de «manitas de ministro» y que su carta también incluye el postre «Brazo de gitano de Balaguer» y que nunca ha tenido por ello ningún problema.
En cualquier caso, añade Punyet, el restaurante eliminará la nomenclatura polémica de la carta «para evitar que pueda ser utilizada para crear una situación no querida por esta parte y, por tanto, pasará a recuperar la denominación anterior, sin perjuicio de poder encontrar una denominación alternativa que no sea susceptible de herir ninguna sensibilidad».
De hecho, el cocinero destaca que la voluntad del restaurante es «fomentar la cultura gastronómica, la buena relación entre los pueblos y la amistad entre las gentes de todo tipo de culturas, religiones y opciones políticas», y por ello pide disculpas a quienes se han podido sentir ofendidos por esta situación.
Además, advierte que la empresa «nunca ha querido crear (polémica), ni consciente ni inconscientemente».
El empresario denuncia, asimismo, que en las últimas horas ha recibido numerosos insultos y amenazas, algunas de muerte, por escrito y a través de mensajes de voz, wasap y redes sociales.
Punyet ha denunciado ante los Mossos d'Esquadra «todas y cada una de estas amenazas», a la espera de que reciban la sanción que corresponda.
El empresario lamenta estar viviendo un «boicot en toda regla» y añade: «No sé cómo acabará esto».
El restaurante Nova Fontblanca fue uno de los ganadores del programa «Joc de cartes» (Juego de cartas) que se emite en TV3 y en el que cada semana compiten varios restaurantes de una ciudad o región concreta. En este caso, el restaurante leridano se impuso a los demás concursantes por ofrecer el mejor plato de caracoles de la comarca de la Noguera.