El diputado de Ciudadanos (Cs) en el Congreso de los Diputados Toni Cantó ha considerado el «viajecito» del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a Benicàssim (Castellón) el pasado viernes «un insulto a la inteligencia y una muestra, otra más, del nulo interés de Sánchez por los problemas de la Comunitat», máximo cuando «el PSPV-PSOE había vendido poco menos que una cumbre política entre ambos para abordar en profundidad las demandas de la Comunidad», ha afirmado en referencia a la reunión entre Puig y Sánchez.
Así se ha pronunciado Cantó durante la celebración del Campus Joven de Cs que tiene lugar desde el pasado viernes en Alicante, donde ha afirmado que el 'president' de la Generalitat Valenciana, «Ximo Puig, el Ayuntamiento de Castelló y por extensión todos los ciudadanos de la Comunitat Valenciana «han servido de coartada» para la visita de Sánchez y su mujer al Festival Internacional de Benicàssim (FIB) para asistir a un concierto de The Killers, según ha informado la formación en un comunicado.
De igual modo, ha indicado el también responsable de Transparencia y del Área Anticorrupción del partido que la reunión quedó «en un café de media hora, lo que quiere decir que Pedro Sánchez no va a hacer nada con respecto a la infrafinanciación de la Comunitat y que está más preocupado en hacer malabarismos con Torrà y Puigdemont».
Por su parte, la vicesecretaria regional del PP valenciano, Elena Bastidas, ha manifestado que es «humillante». Y el senador Carles Mulet, de Compromís, ha registrado una batería de preguntas para conocer el coste económico que ha tenido el desplazamiento, que incluyó el avión privado del presidente, según informa el diario ABC. El periódico asegura que Pedro Sánchez aterrizó en el aeropuerto de Castellón con una breve agenda política: visitó la localidad, donde se vio con la alcaldesa, Amparo Marco, paseó por las calles y se reunió durante 45 minutos con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig. A continuación, se trasladó al festival con su esposa.