Las negociaciones entre los grupos parlamentarios para la elección del nuevo presidente de RTVE han encallado a lo largo de este viernes, en el que PNV y ERC han mostrado reticencias al candidato consensuado entre PSOE y Podemos.
A menos de 72 horas de que arranque el lunes el primero de los plenos extraordinarios que habrán de culminar con la elección del nuevo Consejo de Administración y el presidente de RTVE, las negociaciones entre los grupos parlamentarios atraviesan un momento farragoso.
La jornada comenzaba a primera hora con el anuncio, hecho por Pablo Iglesias, de que el periodista de Eldiario.es Andrés Gil era el candidato consensuado entre el PSOE y Podemos para presidir RTVE, una noticia que ha sido recibida por la oposición con poco entusiasmo y muchas críticas.
De hecho, las objeciones del PNV y de ERC han impedido que Gil, redactor jefe de política del diario digital, se mantenga a estas horas como el candidato con el respaldo necesario para presidir RTVE de forma temporal hasta que se resuelva el concurso público.
Ante las numerosas reacciones políticas a la candidatura de Gil, la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha reconocido que en este momento «las cosas están suficientemente abiertas» y ha recordado que los grupos tienen hasta el lunes al mediodía para negociar los candidatos.
«Ustedes saben que las fuerzas políticas podemos llegar a acordar en los diez últimos minutos, hasta que suene el gong», ha confiado y ha insistido en que la decisión corresponde al Parlamento, por lo que el Ejecutivo no puede «afirmar ni negar ningún nombre».
Además, Celaá ha rechazado que Podemos tenga un papel prioritario en la negociación para designar a la dirección de RTVE: «No me consta que estemos priorizando a Podemos», ha subrayado.
Desde Bruselas, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido «enormes dosis de responsabilidad y más de generosidad» para acordar los nombramientos.
El jefe del Ejecutivo ha solicitado a los parlamentarios que antepongan los «intereses comunes de regeneración democrática» a los intereses políticos para consensuar la cúpula interina de la radiotelevisión pública.
Pese a esta petición, tanto el PP como Ciudadanos han vuelto a mostrar su disconformidad con el decreto ley que obliga a las Cortes a renovar RTVE y han criticado la supuesta cercanía de Gil a Podemos.
El más duro ha sido el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, quien ha aseverado que poner a Gil en la presidencia de RTVE sería «regalar la televisión pública a Podemos» y que supondría «pagar a Pablo Iglesias el precio por su apoyo en el día de la moción de censura».
Pese a insistir en que su partido presentará un recurso de inconstitucionalidad contra el decreto para la elección urgente de la cúpula de RTVE, Hernando ha confirmado que el PP está participando en el proceso de designación de nombres por «responsabilidad».
En sentido contrario se ha pronunciado el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, quien ha asegurado que «no participará en este atropello ilegítimo».
«Cuando habíamos impulsado y logrado una ley para elegir por primera vez por concurso público la dirección de RTVE, Sánchez e Iglesias la revientan con un dedazo al estilo Rajoy y liquidan la regeneración», ha escrito en Twitter.
Sin embargo, la clave del éxito del proceso de elección de estos cargos temporales la tienen PNV y ERC, ya que de sus apoyos depende que los nombramientos salgan adelante.
El PNV, que ha conocido esta candidatura a través de los medios de comunicación, ha subrayado que «hoy por hoy» no apoya el nombramiento de Gil, si bien está dispuesto a «hablar, escuchar y ser consultado» antes de adoptar una decisión definitiva.
«Tanto la reacción de los trabajadores con los que ha podido intercambiar impresiones como lo trasladado por el propio Comité de Empresa del Ente, unido a las formas (la filtración sin una consulta previa a EAJ-PNV) han llevado a que, hoy por hoy, la posición de este partido sea la de no apoyar la candidatura de Andrés Gil», señala el PNV.
En ERC también admiten que aún están estudiando la candidatura de Gil y no tienen cerrada su postura.
El lunes por la mañana, tanto el Congreso como el Senado han de conocer los nombres de los candidatos que se someterán a votación en los plenos extraordinarios: el primero, en la Cámara Baja el lunes a las 16 horas, y el segundo en la Alta, el martes por la tarde.
La renovación de la cúpula de la radio y la televisión públicas debe contar con el visto bueno de dos tercios del Congreso y del Senado en primera votación y, si esta no prospera, de la mayoría absoluta de ambas Cámaras en un segundo escrutinio, en el que se requiere además el apoyo de la mitad de los grupos.
Mientras los políticos negocian para tratar de sacar un acuerdo adelante, los profesionales de la corporación han celebrado hoy su décimo «viernes negro», una reivindicación por la independencia y la pluralidad.
Desde los Consejos de Informativos de RTVE muestran prudencia a la espera de los nombramientos definitivos y han vuelto a defender la necesidad de un proceso limpio, riguroso, que acabe en una radiotelevisión independiente y de calidad.