Llega un momento crítico para Mariano Rajoy, con la moción de censura del PSOE planteada en su contra, y el presidente del Gobierno sorprende a todos con una corbata de color verde, ya que nos tiene acostumbrados a verle lucir colores mucho más sobrios y menos llamativos que el que popularmente se conoce como ‘el color de la esperanza'.
Hágamos una pequeña prueba. Escribiendo Mariano Rajoy en Google y seleccionando el apartado de ‘Imágenes' obtenemos numerosos resultados de sus apariciones públicas. En la mayoría de ellas el presidente del Ejecutivo y del Partido Popular apuesta por tonalidades diversas de colores oscuros como el negro o el marrón, normalmente lisas pero en ocasiones también con un discreto estampado.
El color azul, corporativo de su formación política, también acostumbra a encontrarse entre los colores preferidos por Rajoy, y en no pocas ocasiones ha elegido el rojo, color asociado por diversos motivos más populares que políticos con España.
Busquen sin embargo alguna corbata de color verde; no la encontrarán. Y es que para su estilo personal, el verde no es una elección común. En política nada es casual y todo elemento, hasta el más pequeño detalle, tiene su razón de ser.
Entonces, ¿por qué ha decidido Rajoy –o sus asesores– acudir al Congreso de los Diputados con una corbata de este verde tan vivo y llamativo? No lo podemos saber a ciencia cierta, pero sí tener fundadas sospechas.
Los verdes en política son los ecologistas, y hasta el momento, Rajoy no se ha caracterizado por primar por encima de otros los valores medioambientales. Culturalmente es el color representativo de tradiciones como la celta o la islámica, pero aquí tampoco veríamos un nexo de conexión.
Sin embargo, el verde en todo occidente es un signo que invita al positivismo y a la afirmación, algo importante y de calado si lo que está encima de la mesa es la valoración de tu trabajo y la continuidad del mismo. El verde en un semáforo significa que puedes seguir adelante.
El verde en una bandera de la playa determina que el usuario puede disfrutar de un baño plácido y sin peligros a la vista. También van bien las cosas cuando los mercados financieros y las bolsas cierran la jornada en verde, en contraposición con los números rojos, que a nadie le gusta tener en su cuenta bancaria.
Siguiendo este razonamiento, puede estar pidiendo Rajoy el apoyo para seguir presidiendo el Gobierno con todo lo que tiene a su alcance. Con la razón, con los argumentos y también con la psicología y la semiótica. Veremos si todo esto sirve de algo o ni siquiera el color verde consigue mantenerlo en La Moncloa.