El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha enviado este viernes una carta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en que pide una reunión para dialogar «sin condiciones, con el respeto institucional mutuo debido, con la predisposición a hablar de todo, sin límite temporal, y con el formato» que ambos convengan más oportuno.
En la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Press, desea que el encuentro sea en los próximos días, y le anticipa que las prioridades del nuevo Govern serán «el progreso, la cohesión social, las prosperidad económica, y la defensa de la democracia y los derechos fundamentales».
Además, le advierte de que el proyecto político del Govern es «el que avaló la mayoría de ciudadanos de Catalunya el pasado 21 de diciembre, fiel a la expresión democrática del 1 de octubre y a su resultado».
«En democracia, como es sabido, el que ostenta la mayoría tiene el derecho a formar gobierno y a dar cumplimiento a su programa», argumenta Torra, y recuerda que en su discurso de investidura ya anunció su voluntad de dialogar con el Gobierno central.
El presidente catalán considera evidente que existe un conflicto político entre Catalunya y el resto del Estado, y reclama que se afronte únicamente desde la política: «Debemos reconducir la política a la política».
Recalca que esta es su primera carta desde que este jueves tomo posesión del cargo, y que está dispuesto a iniciar este diálogo sin condiciones y con respeto mutuo «mañana mismo».
Torra asegura que pretende hacer del diálogo uno de los ejes de la legislatura: «Y será así porque forma parte de nuestra manera de ser, porque estamos convencidos de que ésta es la mejor manera de avanzar».
PRESOS SOBERANISTAS
Torra también alega que las circunstancias de Catalunya han sido y continúan siendo excepcionales «por la existencia de políticos catalanes, demócratas y honorables, en plenitud de derechos políticos, en situación de prisión preventiva o en el exilio».
El nuevo presidente de la Generalitat envía esta carta mientras define su nuevo Govern, en el que quiere situar de nuevo a consellers cesados por el artículo 155 de la Constitución, algo que el Gobierno central rechaza.
Defiende que Catalunya es un país diverso, cívico, respetuoso, profundamente comprometido con los valores democráticos y «que aspira legítimamente a disponer para el futuro de mejores oportunidades para todos los catalanes». Torra finaliza la carta deseando saludar personalmente al presidente y enviándole un cordial saludo.