El actor Willy Toledo no ha acudido a declarar ante el juez que le había citado como investigado por un delito contra los sentimientos religiosos al haber insultado a Dios y a la Virgen, una incomparecencia por la que la asociación de abogados cristianos ha pedido que se le multe.
El Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid había citado para hoy a Willy Toledo por unos comentarios en la red social Facebook en los que criticaba la apertura de juicio oral contra tres mujeres que en 2014 procesionaron una gran vagina en Sevilla.
«Yo me cago en Dios y me sobra mierda para cagarme en el dogma de la santidad y virginidad de la Virgen María», escribió el actor, que al conocer su citación como imputado ya advirtió de que no acudiría a declarar para no participar en una «farsa» y que tendrían que detenerle.
La presidenta de la Asociación de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, ha explicado al salir del Juzgado que el actor no ha presentado «ningún justificante legal ni ningún motivo» para su incomparecencia, por lo que «no ha acudido porque no ha querido».
Por eso la asociación pedirá una multa y, si el actor sigue sin comparecer, solicitará que se le impute obstrucción a la justicia, según Castellanos, que ha incidido en que Willy Toledo tiene que cumplir la ley «como todos».
Ha precisado que las multas pueden ascender hasta los 5.000 euros y que el Juzgado aún no ha puesto fecha para una nueva citación.
La presidenta de Abogados Cristianos ha incidido en que pedirán multas coercitivas cada vez que no comparezca «porque este señor tiene que cumplir la ley igual que la cumplimos todos», y ha considerado que quizá «está acostumbrado a otros sistemas, como el cubano o el venezolano, donde ni siquiera hay juicio ni declaraciones».
«También es cierto que cuando te arropan las manifestaciones y te arropan las multitudes es más fácil, pero cuando el ciudadano tiene que estar solo, cara a cara, es otra cosa, es diferente», ha añadido.
La letrada ha recalcado que solo buscan «respeto» para los católicos y «que se cumpla la ley, tras constatar que Willy Toledo «no deja de ofenderles», y ha sostenido que esos «insultos gratuitos» no se pueden tolerar en un Estado democrático.
Ha puesto de relieve que recientemente el Tribunal Supremo «ha puesto freno a dos insultos en sendas sentencias» referidas a delitos de odio cometidos contra mujeres y a gais, y ellos piden «simplemente lo mismo» ya que los católicos no son «ciudadanos de segunda».