El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte ha remitido un escrito al Departamento de Enseñanza catalán por casos denunciados sobre posible adoctrinamiento en centros educativos de la comunidad autónoma. Se trata del primero que se produce después de la aplicación en la comunidad autónoma después de la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
El propio Ministerio ha informado de esta situación, en una respuesta, con fecha de 9 de enero, a una pregunta parlamentaria de la portavoz de Ciudadanos en materia de Educación, Marta Martín, en la que de le pedía explicaciones por la «exhibición en centros educativos públicos de Cataluña de símbolos independentistas y en favor del referéndum ilegal del 1 de octubre».
En el texto de Educación, recogido por Europa Press, el departamento que dirige Íñigo Méndez de Vigo, explica que está «actuando por la vía administrativa» con el objetivo de que la inspección educativa intervenga conforme a la normativa vigente ante casos de adoctrinamiento en centros educativos. Pero, además, asegura que «no renuncia a emprender cualesquiera otras acciones contempladas en el ordenamiento jurídico vigente».
Este requerimiento se envía tras la aplicación del 155 en Cataluña que implicó que Méndez de Vigo asumiera las competencias en materia de Educación en la comunidad autónoma catalana.
Se trata del cuarto aviso que recibe la autonomía por denuncias de posible adoctrinamiento en las aulas. Las tres anteriores, enviadas en los meses de septiembre y octubre, piden que se investiguen los actos cometidos en los centros, y en los que pudieran estar implicados menores, con motivo de la celebración del referéndum del 1 de octubre.
Entre el primer y el segundo requerimiento, el Gobierno recogió una veintena de denuncias de posible adoctrinamiento, mientras que el tercero se refiere a la convocatoria de huelgas y manifestaciones en torno al mencionado referéndum e incide en que se ha «involucrando a los alumnos en este tipo de actuaciones.
Según este documento de Educación, podría haber indicios de que se están «conculcando diferentes derechos, desde el restarles tiempo y enseñanzas en su proceso educativo, como el de no proporcionarles la suficiente protección para su desarrollo personal e intelectual».
Fabricación de urnas de papel, comentarios y charlas a menores sobre la acción de los policías en la jornada del 1-O, o la participación de alumnos en manifestaciones para pedir la libertad de 'los Jordis', son algunas de las denuncias que han interpuesto los padres de diferentes centros públicos de Cataluña.