El rapero Pablo Hasel ha explicado en el juicio contra él por alabar a grupos terroristas e insultar a la Corona y a la Policía en Twitter, que los miembros de los Grapo son para él «ejemplos de resistencia» y que sus críticas al rey emérito son «datos objetivos» que han aparecido en medios de comunicación.
«A ver si voy a ser yo el culpable de que el rey financie sus cacerías con dinero público y a sus amantes», ha planteado el rapero, que también ha defendido los comentarios injuriosos que lanzó contra los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado porque, a su juicio, es también un dato objetivo que «asesinaron» a 15 inmigrantes en el Tarajal (Ceuta) y quedaron impunes.
Hasel, cuyo verdadero nombre es Pablo Rivadulla y que se enfrenta a dos años y medio de cárcel por estos hechos, ha reconocido ser el autor de esos tuits y, tras definirse como comunista, ha destacado que los Grapo a los que aludió en sus mensajes «son comunistas que son ejemplos de resistencia» por las condiciones «muy duras» que han tenido, según él, que sufrir en la cárcel.
«Defiendo la libertad para que cada uno escoja sus ejemplos de resistencia, a mi nadie me tiene que decir quién es un ejemplo», ha insistido el acusado -que en 2014 ya fue condenado a dos años de cárcel por enaltecimiento del terrorismo-, al indicar que a él, por ejemplo, no le gustan los marines estadounidenses, pero «no pediría cárcel a quien diga que les representa».
Respecto al vídeo que publicó en 2016 en Youtube dedicado al rey Juan Carlos, titulado «Juan Carlos el bobón», ha asegurado que «medio país» piensa cómo él y por ello se ha preguntado «si quieren encarcelar a medio país que piensa lo mismo».
Según su declaración, lo que refleja ese vídeo es que se han financiado con dinero público las «juergas y amantes» del Rey «como a Bárbara Rey», algo que, ha apuntado, ha sido recogido en numerosos medios comunicación, en la prensa del corazón y en libros como el del coronel retirado Amadeo Martínez Inglés.
Respecto a las injurias cuerpos policiales, la acusación se centra en un tuit en el que comparaba la condena a dos anarquistas por la colocación de una bomba en la basílica del Pilar de Zaragoza con la «impunidad» de los guardias civiles «por decenas de inmigrantes asesinados».
«Ahí solo estoy comparando una condena por estragos con la impunidad de unos asesinatos», se ha justificado ante la fiscal, que en ese momento le ha recordado que por ese artefacto resultó herida una persona que se encontraba en la basílica y las consecuencias podían haber sido más graves.
Ante esto, Hasel ha añadido: «¿Soy el culpable de que la Policía asesine? Es innegable que asesinaron a 15 inmigrantes» y ha señalado que ninguno de esos agentes «ha sido expulsado del cuerpo ni condenados. Si continúan en el cuerpo es que se les da impunidad para matar», ha reiterado.
Al hacer uso de su derecho a la última palabra, el rapero ha leído un tuit de la Policía Nacional que decía que decir ojalá se muera o desear una bomba no es delito, «y a mí por relatar hechos objetivos se me quiere condenar», ha lamentado.
En su opinión, «los límites de la libertad de expresión son siempre para los mismos, los antifascistas» y por eso cree que «el error» es no ser «un fascista que desea bombas a los homosexuales o a los catalanes».
«Esto es otra inquisición en la que no se puede ni siquiera contar hechos verídicos», ha añadido al preguntarse «¿si se han vendido armas a Arabia Saudí, yo que tengo qué decir? ¿qué son para garantizar una vida a la población?», ha dicho en alusión a las críticas que hizo sobre las relaciones de la Corona con la monarquía saudí a la que relacionó con el ISIS.
Al término del juicio, que ha quedado visto para sentencia, la fiscal Ana Noé ha mantenido su petición de cárcel para él y el pago de multas que suman 40.500 euros, al entender que incitaba a la violencia con sus mensajes.
«Fomentar este tipo de mensajes en internet supone ir mucho más allá de la libertad de expresión y adentrase en la apología del terrorismo» y ha considerado que sus comentarios sobre la Corona o la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado «excede de lo que es una mera crítica y ni la libertad de expresión ni la critica amparan ese tipo de comentarios».
Su abogado ha solicitado por su parte que se le absuelva porque sus comentarios están amparados en la libertad de expresión y sus críticas a las citadas instituciones forman parte de la «crítica popular», y sobre los tres grapo a los que alabó en sus tuits «murieron bajo custodia estatal, ya sea por disparos o en prisión, en cualquier caso indebidamente».
A su salida de la Audiencia Nacional, un pequeño grupo concentrado en la calle Génova ha comenzado a gritar: «Pablo Hasel, absolución».