El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha llamado a construir «un país mejor» en forma de una «república grande, libre, próspera y democrática» ante los que quieren «empequeñecer y atemorizar», y que pretenden «liquidar» a los soberanistas «por pensar diferente».
Puigdemont ha intervenido, a través de un vídeo grabado en Bélgica, en el acto «Juntos por el Deporte», organizado por su candidatura, Junts per Catalunya, en la Estació del Nord de Barcelona, con el fin de recaudar fondos para 'La Marató de TV3', un programa benéfico que este año se dedica a luchar contra las enfermedades infecciosas.
El número uno de JxCat ha subrayado que las elecciones del 21 de diciembre son para elegir entre construir «un país menor», que es el que quieren los que pretenden «empequeñecer y atemorizar» a los que desean la independencia, y los que desean «un país mejor», en el que pueda «progresar todo el mundo» sin que se «liquide a quien piense diferente, ni se desinfecte a nadie, ni se envíe a nadie al exilio».
Así se ha referido Puigdemont a las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y a las del socialista Josep Borrell, expresidente del Parlamento Europeo.
Puigdemont ha subrayado que el 21D el soberanismo necesita «ganar» para poder «brillar como un país mejor» y para poner esta «victoria al servicio de los catalanes», con el fin de contribuir a «hacer grande, libre, próspera y democrática esta república catalana», ha dicho.
En el acto ha intervenido también el exconseller de Presidencia Jordi Turull, quien ha denunciado que «el bloque 155 quiere destruir lo que funciona y el deporte no ha quedado al margen».
El exconseller y candidato ha resaltado que JxCat «encarna» la «reacción de país» que cree que debe darse en las elecciones del 21 de diciembre para que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, «quite las garras» de las instituciones catalanas.
También han participado los candidatos Pilar Calvo, Josep Riera, Imma Gallardo, Gerard Figueras y Anna Tarrés, procedente esta última del mundo de la natación sincronizada y quien ha subrayado que en estas elecciones «el rival no juega limpio, el árbitro está comprado y el comité de competición mira para otro lado».
Antes del acto celebrado en el vestíbulo de la Estació del Nord, Tarrés y Turull han disputado un partido de ping-pong ante las cámaras.