Los abogados de los líderes independentistas Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, a los que el juez ha decidido mantener en prisión incondicional, han anunciado que recurrirán esta decisión e insisten en que sus defendidos siempre han actuado pacíficamente y «jamás han incitado a la violencia».
A las puertas del Tribunal Supremo tras recoger el auto del juez Pablo Llarena, en el que mantiene en prisión al exvicepresidente Oriol Junqueras, al exconseller de Interior Joaquim Forn y a Sánchez y Cuixart, ambos letrados han reiterado ante los medios que todas las manifestaciones promovidas por sus clientes han sido pacíficas.
Jordi Pina, que defiende a Sánchez y a los exconsellers Jordi Rull y Josep Turull -estos dos podrán salir de la cárcel si abonan una fianza de 100.000 euros-, ha discrepado de la decisión del juez de mantener en prisión a cuatro de los investigados por no «ajustarse a derecho».
Ha explicado Pina que la argumentación del juez Llarena es «errónea» y supone un «mazazo» para su cliente y para los otros tres imputados que continuarán en prisión.
Le ha sorprendido «excepcionalmente» que Llarena señale en su alto que las aportaciones de Junqueras, Forn, Sánchez y Cuixart «están directamente vinculadas a una explosión violenta», pues, según el abogado, «la única violencia que ha habido en Cataluña la han propiciado grupos de ultraderecha».
El único «lamentable incidente», ha proseguido Pina, se produjo el 20 y 21 de septiembre durante el asedio a la Guardia Civil frente a la Consellería de Economía en el que «unos inútiles se limitaron a pinchas las ruedas y hacer destrozos en unos vehículos policiales, algo que tanto Sánchez como Cuixart han condenado enérgicamente».
Niega además que exista riesgo de reiteración delictiva en los investigados y lamenta que todas las actuaciones promovidas por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural sean achacadas a Sànchez, que dejó de ser presidente de ANC cuando decidió concurrir a las elecciones como número dos de la lista del expresident Carles Puigdemont, y a Cuixart.
En este sentido, desvincula a ambos líderes independentistas de otras actuaciones como los «asedios a hoteles» donde se hospedaban policías y guardias civiles o del corte de algunas carreteras debido a la huelga del pasado 8 de noviembre.
También ha criticado la incorporación a la causa del documento EnfoCat, en el que se determinaba la hoja de ruta a seguir tras la declaración unilateral de independencia (DUI) y donde se hablaba de un comité estratégico formado por el presidente y vicepresidente del Govern, miembros de grupos parlamentarios independentistas y los presidentes y vicepresidentes de ANC, Òmnium y Asociación de Municipios para la Independencia (AMI).
Según Pina, este documento, que fue hallado en el domicilio del ex número dos de Junqueras Josep María Jové, «no tiene firma ni fecha» y ni Sánchez ni Cuixart «tienen idea de quién lo ha hecho, para qué, cómo y cuándo».
«Le puedo asegurar que Sànchez y Cuixart tuvieron conocimiento de la existencia de este documento cuando las defensas lo exhibimos para preparar su declaración».
Por su parte, la abogada de Cuixart, Marina Roig, ha reiterado que ni su cliente ni Sànchez se esperaban que «esto pudiera degenerar en una situación violenta» ya que «ellos siempre han insistido mucho a la gente en que actuaran de manera pacifica» y nunca han pretendido «contribuir a ningún tipo de estallido social sino canalizar la protesta por una serie de actuaciones».