El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha asegurado este miércoles que el refuerzo de policías y guardias civiles en Cataluña se mantendrá «mientras sea necesario», y ha garantizado que se adoptarán «todas las medidas legales» para impedir «cualquier ataque a la dignidad» de estos efectivos.
Así ha respondido Zoido a preguntas del PNV, Podemos y Ciudadanos interesados, en la sesión de control al Gobierno en el Congreso, sobre el despliegue de policías y guardias civiles en Cataluña, sus condiciones de trabajo y los actos de hostigamiento que están sufriendo algunos agentes en los últimos días.
El ministro ha reiterado que la movilización de unidades de Policía y Guardia Civil a Cataluña tiene como objetivo apoyar a los Mossos en el mantenimiento del orden público, en cumplimiento de una orden de la Fiscalía, por lo que «no es una medida de excepción» ni tampoco es inconstitucional, tal como ha asegurado el diputado del PNV Mikel Legarda.
«Lamento discrepar y me siento orgulloso de ello, pero le digo que no es inconstitucional», ha afirmado Zoido después de dejar claro que la presencia de Policía y Guardia Civil en Cataluña «se va a mantener mientras sea necesario para garantizar que se cumple la ley, se respetan los derechos y se garantizan las libertades».
Respecto al «acoso» y «escraches» e, incluso, la difusión por un medio de comunicación de los movimientos de los agentes, ha dicho Miguel Gutiérrez, de Ciudadanos, el titular de Interior ha calificado de «intolerable» que se dificulte la labor de los efectivos.
«Es intolerante que se atente contra sus vehículos, es intolerable que se pida que se informe sobre sus movimientos y es intolerable que se les trate como enemigos cuando son servidores públicos», ha añadido Zoido que ha avanzado que se adoptarán «todas las medidas legales» para impedir que se les falte al respeto y se dificulte «cualquier ataque contra su dignidad y contra la libertad», especialmente en lo relativo a sus movimientos.
Zoido ha enfatizado que desde su departamento se está haciendo «todo lo posible» para que los agentes trabajen en las mejores condiciones posibles y no tengan que enfrentarse a «complicaciones añadidas» a su trabajo, que no es otro que el cumplimiento de la ley.
En su réplica, Miguel Gutiérrez ha ido más allá al criticar la «falta de lealtad» en algunas ocasiones de la cúpula de los Mossos «impasibles» a la comisión de delitos.
«No permitan que estas disfunciones pongan en riesgo la seguridad de los catalanes. La dimensión política no puede nunca estar por encima de la seguridad», ha apelado el diputado de Ciudadanos al que Zoido, sin entrar en polémica, ha respondido: «Existe una magnífica colaboración entre las fuerzas de seguridad y estamos poniendo todo de nuestra parte para que la coordinación con los Mossos pueda dar como resultado el cumplimiento de la ley».
Sobre las condiciones laborales de estos agentes también se ha referido el diputado de Podemos Juan Antonio Delgado, que ha criticado que los agentes movilizados a Cataluña desconocen sus horarios y sus planes de trabajo, mientras se les ha puesto en el «disparadero» cuando hace años que no se ocupan del orden público en esa comunidad, donde un mosso cobra, ha dicho, 700 euros más al mes que un guardia civil.
«Son los mejores pero bien que les critican cuando registran la sede del PP o como ha hecho la señora Cristina Cifuentes en el marco de la operación Lezo», ha afeado Delgado -exguardia civil-, que ha pedido a Zoido que dejen de abusar del prestigio de la institución y ha concluido su intervención con un «viva la Guardia Civil».
En su respuesta, el ministro ha sostenido que desde Podemos no pueden defender «ni la imagen ni el prestigio» del instituto armado cuando esta formación «llama a Otegi hombre de paz» o se pone del lado de los agresores de los guardias civiles en Alsasua.