El conductor del vehículo que atropelló a dos Mossos d'Esquadra en un punto de control de la avenida Diagonal a la salida de Barcelona y fue interceptado en el municipio cercano de Sant Just Desvern no murió a causa de los disparos de los agentes, y se investiga todavía si estaba relacionado con el atentado en La Rambla.
Las intervenciones en rueda de prensa del major de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, acompañado del conseller de Interior, Joaquim Forn, detallaron que el conductor había arrollado a una sargento rompiéndole el fémur: «el agente de su lado ha repelido la agresión y ha acabado con la muerte del conductor, que es un nacional y no tiene antecedentes».
Sin embargo, horas después se comprobó que la causa de la muerte no habían sido los disparos del agente. Así, la autopsia practicada arrojó una causa distinta de la muerte, que se ignora pero que están siendo investigada, según declaró Forn a Rac1 y al canal 3/24.
Horas más tarde trascendió que el hombre presentaba heridas de arma blanca, y a pesar de que en un principio se desvinculó de la acción terrorista del centro de Barcelona, a primera hora de este viernes fuentes oficiales comunicaron que no se puede descartar aún esa hipótesis.