El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha enviado este viernes una carta a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, en la que le solicita celebrar un debate en la Cámara Baja sobre el referéndum unilateral que quiere convocar para el 1 de octubre.
En la carta, a la que ha tenido acceso Efe, Puigdemont manifiesta su convicción de que «un debate de esta trascendencia es necesario y se ajusta a lo que los ciudadanos esperan de sus instituciones de representación» y se pone a disposición de Pastor para que «se pueda celebrar lo más pronto posible».
Puigdemont solo se ofrece para un «debate» en la Cámara y remarca que no le parece «razonable» llevar ninguna propuesta concreta para someterla a votación del pleno, habida cuenta del desenlace de otras iniciativas catalanas anteriores presentadas en las Cortes Generales, en alusión al plan Ibarretxe.
Así, en la carta, el presidente catalán señala que «las aspiraciones legítimas y mayoritarias -de Cataluña- siempre han sido rechazadas, recortadas o incumplidas» en la Cámara Baja o por parte del Gobierno central.
En este sentido, Puigdemont afirma que no le parece «razonable volver a formular propuestas que están destinadas a correr la misma suerte», con lo que descarta una votación sobre el referéndum.
«Sin embargo -precisa-, sí me parece importante que todos los diputados del Congreso puedan escuchar, en tanto que máximo responsable institucional de Cataluña, las razones por las cuales hemos llegado hasta aquí y por qué mi Gobierno solicitó dialogar sobre la propuesta de referéndum con el Gobierno español».
Puigdemont hace referencia asimismo a la carta que envió al jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, para tratar de negociar un referéndum y subraya que solo obtuvo un «rechazo» como respuesta.
El presidente catalán también informa a Pastor de que el pasado viernes anunció su intención de celebrar un referéndum de autodeterminación para el 1 de octubre con la pregunta: «¿Quiere que Cataluña sea un Estado independiente en forma de república?».
El pasado 19 de mayo, el Gobierno invitó a Puigdemont a someter su propuesta de referéndum a la votación del Congreso de los Diputados y el presidente catalán puso como condición llegar antes a un pacto, que el Ejecutivo central insistió en que no se va a producir.
Acto seguido, el presidente catalán anunció su voluntad de acudir al Congreso de los Diputados a debatir con Rajoy sobre el referéndum, sin someterlo a votación, una propuesta que se ha materializado hoy a través de la misiva a Pastor.