El Gobierno ha decido repartir el nuevo margen de déficit público, de hasta ocho décimas -tras elevarlo del 2,8% del PIB al 3,6% para 2016-, a partes iguales entre las comunidades autónomas y la Seguridad Social, según ha informado el Ministerio de la Presidencia.
Así, las comunidades autónomas no tendrán que reducir su déficit en 2016 del 1,66% del PIB al 0,3%, como estaba previsto, sino hasta el 0,7%, lo que hace que este esfuerzo sea «mucho más asequible», según el Gobierno, que recuerda además que este objetivo del 0,7% «es el que tenían que haber cumplido las comunidades autónomas en 2015 y que sólo alcanzaron tres de ellas», en referencia a Canarias, Galicia y el País Vasco.
«Ahora, el conjunto de las comunidades autónomas tienen un año más para alcanzarlo, y para ello van a contar con un incremento de la financiación autonómica de 7.400 millones de euros respecto a la que tuvieron el pasado año, y con un ahorro de intereses de más de 3.000 millones de euros por los préstamos conseguidos a través de los mecanismos de liquidez puestos en marcha por el Estado», apostilla el Ministerio de la Presidencia.
Por otro lado, la nota señala que el nuevo margen de ocho décimas «se va a repartir entre la Seguridad Social y las comunidades autónomas», de lo que se desprende que las otras cuatro décimas restantes irán a parar a la Seguridad Social.
No obstante, la nota no hace referencia expresa al nuevo objetivo de déficit de la Seguridad Social, que parte de un saldo negativo del 1,26% del PIB en 2015 y que tendría que reducirlo, según el objetivo fijado antes de la revisión, al 0,3% del PIB.
Además, tampoco se hace referencia al déficit del Estado, si bien el ministro de Economía, Luis de Guindos, indicó este martes en el Congreso de los Diputados que el déficit de la Seguridad Social tenía que considerarse conjuntamente con el del Estado, dado que recibe transferencias de éste. Por su parte, las entidades locales mantendrán su objetivo inicial del 0% del PIB.
De esta forma se despeja la incógnita del reparto del nuevo objetivo de déficit para 2016 entre las distintas administraciones, después de que el Gobierno anunciara que el Programa de Estabilidad 2016-2019 incluirá una nueva senda de déficit que aplaza un año la reducción de este saldo por debajo del 3% del PIB, hasta 2017, lo que supone salir del protocolo de déficit excesivo.
No obstante, el Gobierno aún no ha remitido la documentación a Bruselas, que tendrá la última palabra una vez Eurostat publique el déficit público definitivo de España en 2015 y la UE emita sus nuevas previsiones macroeconómicas de primavera a principios de mayo.
En cualquier caso, el comunicado del Gobierno señala que este jueves se ha acordado en la Comisión General de Secretarios de Estado y Subsecretarios transmitir a la Comisión Europea «que mantiene su compromiso con la reducción del déficit público, con una nueva senda de consolidación fiscal, compatible con el crecimiento económico y la creación de empleo».
Nuevo Consejo de Política Fiscal el 28 de abril
Por otro lado, el Gobierno ha informado de que para garantizar que se cumpla la regla de gasto y la nueva senda de consolidación fiscal, el Estado ha aprobado la aplicación de varios artículos de la Ley de Estabilidad Presupuestaria con medidas preventivas y coercitivas, dando cumplimiento a la recomendación autónoma remitida por la Comisión Europea tras el incumplimiento por parte de las comunidades autónomas del objetivo de déficit en 2015.
El Ministerio de Hacienda ya ha comenzado a celebrar esta misma semana reuniones técnicas bilaterales con las comunidades autónomas afectadas para negociar el contenido de los planes de ajuste y de los Planes Económico Financieros.
Por último, el Gobierno informará de la nueva senda de consolidación fiscal a la Comisión Nacional de la Administración Local el próximo 26 de abril y al Consejo de Políticas Fiscal y Financiera (CPFF) el jueves 28 de abril.