La semana política que empezó con la expectativa de la primera reunión a tres que iban a mantener PSOE, Podemos y Ciudadanos, ha terminado con el portazo del partido de Pablo Iglesias a los socialistas y con un Mariano Rajoy ofreciendo de nuevo a Pedro Sánchez liderar un Gobierno de coalición. «Es lo único que es viable hoy», ha asegurado el presidente del Ejecutivo en funciones.
La oferta de Rajoy no es nueva, pero se produce en un momento en el que la repetición de las elecciones generales se vislumbra ya como la única salida posible, después de que el intento de entenderse entre el PSOE, Podemos y Ciudadanos acabara con un distanciamiento si cabe mayor que el que podía existir antes del encuentro.
Ante este panorama, Rajoy ha planteado esta oferta en la convención del PP celebrada en Barcelona este sábado con el título 'Pacto por el fortalecimiento institucional', donde ha defendido que el único escenario para evitar elecciones es esta coalición: «La propuesta que están en vigor es la del PP y si quiere -el PSOE- estamos dispuestos a hablar de la misma», ha dicho.
Rajoy ha añadido que estará «encantado» si C's quiere entrar en este pacto pero ha recordado que, si hubiera acuerdo PP-PSOE, los votos del partido de Albert Rivera serían innecesarios para que cristalizara una investidura en el Congreso.
Mientras tanto, también en Barcelona, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, aseguraba este sábado sobre las negociaciones para formar un nuevo Gobierno: «No nos vamos a vender».
Lo dijo al inicio de una reunión con los círculos del partido en Catalunya, en el que se escucharon cánticos de 'Sí se puede' y 'No queremos pacto'.
Ha advertido de que ahora se debe estar «preparado para lo que venga», ha criticado que en los últimos días se ha querido domesticar al partido, y ha defendido que no entraron en política hace dos años para «elegir entre 'Guatemala y Guatepeor'.
«No somos como ellos. No queremos que Podemos se convierta en lo que quieran los adversarios de la gente», ha dicho Iglesias, que ha insistido en que su partido quiere un gobierno progresista.
Para Iglesias, lo cómodo sería pasar a la oposición, pero ha destacado que Podemos se presentó a las elecciones porque cree que «las cosas se pueden cambiar desde las instituciones», y también ha destacado el papel fundamental de Catalunya en el resultado del partido en las generales.
Después, en respuesta a preguntas de los círculos, ha asegurado que el partido ha tomado la decisión «más democrática» al preguntar a sus afiliados si deben apoyar o no el pacto entre el PSOE y C's, y ha retado a los socialistas a hacer lo mismo con una pregunta clara sobre el acuerdo con el partido de Albert Rivera.
Ha reiterado que para evitar elecciones solo hay dos opciones: la coalición PP-PSOE-C's o bien la coalición progresista PSOE-Podemos y sus confluencias-IU con apoyo de otros partidos, pero tiene la impresión de que a los socialistas les han «prohibido» esta última.
El PSOE no entiende a Podemos
Y desde Barcelona, donde este sábado estuvieron Rajoy e Iglesias, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha asegurado que no entiende a Podemos por presentar un documento de 20 propuestas el miércoles y después levantarse de las negociaciones «sin esperar respuesta».
Durante su discurso en el Consejo de Alcaldes del PSC, ha reiterado que hace falta un acuerdo para un gobierno de cambio en España y evitar que el presidente en funciones, Mariano Rajoy, tenga una nueva oportunidad que no merece, según él.
Admite que Podemos está en su derecho de plantear propuestas y exigir cambios, pero le pide esperar a la respuesta de los demás partidos: «No he entendido a Podemos», ha insistido.
Iceta ha criticado que el líder del partido, Pablo Iglesias, pida a sus bases elegir entre un gobierno PSOE-C's o uno sin C's: «Hacen lo contrario que el PSOE, que hizo una consulta para preguntar a sus militantes sí querían sumar, y no dividir».
«Tenemos una gran oportunidad en España para solucionar la crisis y sus consecuencias, la corrupción y la cuestión catalana», según Iceta, que ven PSOE y Podemos suficientes coincidencias para alcanzar un acuerdo, y ha asegurado que no hay voluntades insalvables, sino sólo pocas ganas de pactar.
Evitar nuevas elecciones
Por su parte, el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha declarado que su formación seguirá trabajando durante las dos semanas que quedan para «evitar el fracaso» que supondría unas nuevas elecciones y ha llamado al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, a «salir de su escondite».
Según Villegas, tras la reunión a tres bandas de este jueves, ha quedado claro que lo que buscaba Podemos no era «mejorar» el acuerdo sellado por el PSOE y Ciudadanos sino «romperlo» para sustituirlo por uno nuevo para tratar de conformar un gobierno a la valenciana con la abstención de los independentistas.
Villegas ha lamentado que los de Pablo Iglesias, «más allá de juegos malabares para confundir a la sociedad sobre las posibilidades de negociación», no se hayan movido «nada» en aras de intentar conformar un ejecutivo alternativo al de Mariano Rajoy.
Así las cosas, el 'número tres' de Ciudadanos ha indicado que ahora, ratificada la imposibilidad de un gobierno en el que estén presentes PSOE, Podemos y Ciudadanos, su partido trabajará para que el PP cambie de postura y se avenga a negociar.
Villegas ha recordado que, tras el fracaso de la investidura de Pedro Sánchez, tanto PSOE como Ciudadanos hicieron llegar una carta a los 'populares' invitándoles a hablar sobre el mismo y que aún están a la espera de que atiendan su solicitud.
Sobre todo, ha dicho, porque apenas quedan dos semanas de tiempo «útil» para cambiar la situación. «Es necesario un cambio de algunos de los actores, Podemos y PP, para desbloquear» el escenario porque, en caso contrario, se repetirán las elecciones, ha insistido.
Mientras eso ocurre, Villegas ha dicho que, pese a las dificultades, Ciudadanos va a seguir manteniendo la esperanza en que el acuerdo puede ser posible y trabajando para que así sea pero, eso sí, sin crear «falsas expectativas».
Preguntado sobre si teme que en estas dos semanas el PSOE dé un giro inesperado a la izquierda, el vicesecretario general de Ciudadanos ha respondido que «ésa es una hipótesis que está ahí» y, de hecho, ha dicho que durante todo este tiempo han trabajado para que ésa no sea la opción de los socialistas. Sin embargo, ha mostrado su confianza en la lealtad del PSOE acerca del acuerdo suscrito en febrero.