Los negociadores de Junts pel Sí y la CUP han cerrado una propuesta para «ensanchar la base social a favor de una república catalana» que incluye «un Govern de transición» con una presidencia coral -poderes repartidos entre cuatro personas- y un proceso soberanista con «seguridad jurídica».
En una conferencia de prensa en el Parlament, el diputado de Junts pel Sí, Raül Romeva, ha presentado «la propuesta de acuerdo», trabajada con la CUP en los últimos dos meses y que la CUP elevará a su Asamblea Nacional del próximo día 27 de septiembre para que la avale.
Romeva ha recalcado que no hay cambio en cuanto al candidato a la presidencia de la Generalitat, que sigue siendo Artur Mas, y ha indicado que el documento también incluye un «proceso constituyente hacia una república catalana» que se debe hacer, ha dicho, con «seguridad jurídica», además de un plan de choque social contra pobreza y desahucios.
Este lunes y martes se han intensificado las reuniones de los dos grupos parlamentarios en la cámara catalana para avanzar en la negociación, teniendo en cuenta que el 10 de enero expira el plazo para un acuerdo; de no ser así, habrá que convocar otras elecciones.
La CUP reclamaba hacía días llegar al fondo de las negociaciones precisamente el día 22, antes de someter el pacto a votación de su Asamblea General el día 27.