El PSOE quiere poner en marcha un «ingreso mínimo vital» de 426 euros mensuales para atender a 730.000 familias sin ingresos y un nuevo sistema de ayudas por hijos a cargo para hacer frente a la situación de los 2,3 millones de niños que viven bajo el umbral de la pobreza. Para ello, los socialistas han calculado que serán necesarios 6.450 millones de euros al año, seis veces más que los que destinan en la actualidad las comunidades autónomas a sus rentas mínimas, que tienen cobertura, cuantías y garantía de acceso muy variable.
La iniciativa la ha anunciado este lunes el secretario general del PSOE y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha precisado que no se trata de una renta básica universal, sino que estará asociada a «un estado claro de necesidad y condicionado a que los beneficiarios se comprometan a aprovechar las medidas de apoyo para salir cuanto antes de esta situación de pobreza».
De los 6.450 millones de euros que prevé incluir el PSOE en los próximos presupuestos a esta partida, 3.857 millones irían destinados a la nueva prestación para familias sin ingresos, de la que se cree que forman parte 1.847.000 personas. Fuentes socialistas han explicado a Europa Press que se ha estimado una cuantía de 426 euros mensuales, homologable a la que contemplan los subsidios por desempleo.
ENTRE 150 Y 50 EUROS AL MES POR HIJOS A CARGO
Al margen de esto, el PSOE quiere dedicar 2.593 millones de euros a prestaciones por hijos a cargo, con el objetivo de atender a los 2,3 millones de menores que viven bajo el umbral de la pobreza. Esta partida tiene como objetivo combatir la pobreza infantil y eliminar la más severa.
En este caso, las ayudas serán escalonadas, en función de las rentas familiares. Así, para rentas inferiores a 7.100 euros al año, habrá una ayuda anula de 1.800 euros; para rentas de entre 7.100 y 11.500 será de 1.200 euros y para rentas de entre 11.500 y 17.000, de 600 euros anuales.
Esta prestación supera en todos los tramos previstos al sistema de protección actual, que estipula una ayuda de 291 euros anuales para hogares con rentas inferiores a 11.500 euros anuales. Será independiente a la situación laboral de los padres, sólo estará vinculada a los ingresos del hogar y podrá ser complementaria a la ayuda para familias sin ningún tipo de ingreso.
ITINERARIOS PERSONALIZADOS DE INSERCIÓN LABORAL
Para poder acceder a la prestación por situación de necesidad de personas o familias sin ingresos, será necesario probar la ausencia de rentas y implicarse en un itinerario personalizado de inserción laboral, con formación para el empleo y búsqueda activa de trabajo.
Según han indicado a Europa Press fuentes socialistas, el objetivo es crear «última red de protección social» para los hogares que no tienen ningún ingreso, sea cual sea la causa.
Así, a esta prestación podrán acceder familias con todos sus miembros en paro que hayan agotado todas las ayudas de los servicios de protección por desempleo y será una extensión de esta protección de 426 euros, una vez finalizada la prestación contributiva y si persiste la situación de paro y no hay ningún ingreso. Pero no excluye otras situaciones, como la de familias monoparentales sin ingresos.
Será una prestación no contributiva de la seguridad social que se gestionará a través del sistema público de servicios sociales y en coordinación con los servicios públicos de empleo de las comunidades autonómas. Para ello, el PSOE plantea un pacto con las comunidades autónomas.
GRANDES DIFERENCIAS ENTRE LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS
En la actualidad, las comunidades autonómas mantienen rentas mínimas, pero con una cobertura y cuantía muy variable. Según han indicado fuentes socialistas, el objetivo ahora es establecer una ayuda homogénea en todo el territorio nacional, para paliar las desigualdades del sistema actual.
Según datos del Gobierno correspondientes a 2013, estas rentas autonómicas tenían una cuantía básica média de 418,58 euros, pero existían grandes diferencias según los territorios. Así, podían ir desde los 300 euros de Ceuta y Murcia, a los 548,51 de Navarra y los 662,51 de País Vasco.
En total, ese año las comunidades autonómas dedicaron 1.040 millones de euros a estos objetivos. Según han indicado fuentes socialistas, el planteamiento del PSOE es que a partir de ahora los Gobiernos autonómicos complementen las ayudas estatales, para poder proporcionar la «atención integral» que requieren las personas en situación de dificultad.