El concejal de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, Guillermo Zapata, ha reiterado este domingo sus disculpas por los polémicos mensajes que escribió en Twitter en 2011 y por los que se le ha acusado de antisemita y de hacer apología del terrorismo, si bien él alega que están «descontextualizados».
Zapata ya justificó a última hora del sábado su postura sobre los 'tuits', y hoy ha extendido su parecer a través de la red social Tumblr, donde ha lamentado «profundamente que (los mensajes) puedan herir la sensibilidad de personas y comunidades», especialmente las de aquellas «que hayan sufrido los efectos del odio» y que puedan «sentir desconsideración hacia su dolor».
«Condeno tajantemente cualquier tipo de racismo y, por supuesto, también el antisemitismo. Considero que del Holocausto judío se desprende una lección que la humanidad nunca debe olvidar, para que nunca vuelva a repetirse. Del mismo modo, me solidarizo con todas las personas inocentes que han sido víctimas de la violencia y sufren desde entonces los efectos de esos ataques», ha subrayado en un escrito publicado en la mencionada red social.
Así, el edil de Ahora Madrid ha apuntado que Twitter «es propicio a las descontextualizaciones, los ataques desproporcionados, y la generación de polémicas que corren como la pólvora».
En este sentido, ha afirmado que sus 'tuits' iban entrecomillados porque «se sitúan en el contexto de una conversación sobre «los límites del humor» y aquello que se puede y no se puede decir en las redes sociales y fuera de ellas», a raíz del despido de Nacho Vigalondo del diario El País «por escribir varios 'tuits' con un supuesto contenido negacionista del Holocausto, cuando se trataba tan solo de una broma».
«Aquellos 'tuits' míos tenían por objeto señalar algunos chistes que fueron de uso común (este es el motivo de que estén entrecomillados) durante un periodo de tiempo en ciertos ámbitos, en concreto el de Twitter, y que son profundamente incorrectos por su crueldad. Obviamente, esto es algo que se pierde si desdibujamos el contexto», ha aclarado.
Por ello, Zapata ha criticado que sus mensajes hayan sido recuperados como si fueran ideas suyas, y el mismo día en que fue nombrado concejal del Ayuntamiento de Madrid, «por lo que la descontextualización de los hechos parece tener una intencionalidad política clara».
«Reitero mi condena al terrorismo de ETA y al antisemitismo y a cualquier otra forma de represión y violencia. Y considero que no es incompatible con el humor negro, siempre y cuando éste sea reconocible como humor», ha apuntado.
Además, ha incidido en que, tras su nombramiento como concejal se debe «ahora más que nunca» a la comunidad, y que ha «adquirido el compromiso de cuidar, respetar y defender las sensibilidades de todas las personas, también aquellas que han podido sentirse heridas».
LOS TUITS ERAN «CHISTES» Y «HUMOR NEGRO»
Zapata justificó además en Twitter este sábado apuntando que algunos «chistes» que se encontraban en su timeline estaban «produciendo enfado». «Siento si es así. El Holocausto me parece deplorable y terrible», ha señalado en referencia a algunos de sus comentarios como «*Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero».
Ante esto, indicó que no es «en absoluto antisemita» sino «al contrario, siempre» le ha interesado «la cultura judía» y no le ha gustado su «criminalización jamás». «Siempre me ha gustado el humor negro y cruel. Lo considero una expresión sana para reírnos de los horrores que hacemos los seres humanos», añadió.
También escribió a la propia Irene Villa, víctima de un atentado de ETA, dado que uno de sus tuits hacía una «chiste» sobre ella. En concreto decía «Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcaser para que no vaya Irene Villa a por repuestos».
Villa, que también tiene twitter, ha indicado que «ningún problema» y que su «chiste favorito» es el que la define como «mujer explosiva», una frase que ha concluido con varias 'caritas sonrientes'.
Zapata, «en cualquier caso», le ha pedido disculpas por el tuit. «No pretendo banalizar una experiencia como la tuya u otras víctimas», ha señalado.
La oposición pide su cese
Pese a sus explicaciones, varios miembros de la oposición han pedido a la alcaldesa, Manuela Carmena, que lo destituya de su cargo por estas declaraciones de 2011.
En este sentido, el concejal del PP Iñigo Henríquez de Luna ha calificado a Zapata como «un personaje radical, sectario y cruel», mientras que la líder de su grupo municipal, Esperanza Aguirre, pidió a través de Twitter a Carmena que ésta exigiera la dimisión del miembro de su gobierno o de lo contrario «será cómplice de sus barbaridades».
En la misma línea se ha pronunciado la portavoz de Ciudadanos en el Consistorio de la capital, Begoña Villacís, quien ha considerado que este tipo de actitudes «si no son permisibles fuera del Ayuntamiento comentarios intolerantes, racistas o que denoten odio, mucho menos dentro del consistorio», ha añadido, por lo que pedirá a Carmena el cese del concejal.
Por su parte, el portavoz municipal socialista, Antonio Miguel Carmona, exigió anoche una «explicación inmediata» a la regidora sobre las polémicas manifestaciones, si bien su compañera de bancada, Mar Espinar, ha exigido este domingo el cese del edil de Cultura y Deportes.