Miembros de la Ejecutiva del PSOE han restado hoy trascendencia para la situación interna de su partido a la reunión que mantuvieron en Navidad el expresidente Zapatero y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, sin conocimiento de Pedro Sánchez, según el Huffington Post y ha confirmado Zapatero en la Ser.
«Es una cena o una comida personal a la que no doy mayor importancia», ha afirmado el portavoz en el Congreso, Antonio Hernando, que ha negado que dicho encuentro a espaldas de Sánchez refleje «ninguna» división interna en su partido.
Para el secretario de Regeneración Democrática del PSOE y líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, el presidente Zapatero «tiene derecho a reunirse con quien considere oportuno», ha dicho, convencido de que eso «no afecta a la realidad orgánica del PSOE en estos momentos».
El valenciano se ha empeñado además, en la línea marcada en los últimos días por Sánchez, en conferir una visión positiva al liderazgo en el PSOE de la presidenta andaluza Susana Díaz, rechazando la percepción de que es una amenaza para Pedro Sánchez.
«El PSOE tiene un secretario general y tiene además líderes de una potencia enorme, como la presidenta de Andalucía, y eso es positivo para nuestro partido», ha señalado Puig, para quien «hacer de eso un problema es no entender que la política exige en estos momentos mucha más fortaleza y visión abierta y no estar sometidos permanentemente al escrutinio de estas cuestiones».
Otro dirigente cercano a Sánchez, el secretario ejecutivo de la Unión Europea, Juan Moscoso, se ha mostrado más crítico: «Ese tipo de reuniones hay que contarlas antes o después», ha subrayado, tras señalar que será Zapatero «el que tendrá que explicar» lo que hizo.
Para Trinidad Jiménez, ministra con Zapatero, es «razonable» que éste se reúna «con todos los actores políticos, sociales y económicos con los que quiera reunirse».
«Es bastante habitual, es normal y no supone ningún tipo de problema para nadie; para mí, ningún problema en absoluto», ha terciado la diputada, que también ha rechazado las «especulaciones» y «rumores» sobre el supuesto apoyo de Zapatero a Susana Díaz para ser la candidata a la Moncloa, frente a Pedro Sánchez.
Jiménez, que ha asegurado no haber «oído nada directamente», sino sólo a través de los medios, ha llamado a esperar a que se «abra el proceso» de primarias para ver qué pasa.