El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, presentará el martes en el Congreso de los Diputados el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado de 2015, en los que destaca la importante influencia que tiene la reforma fiscal que entra en vigor el próximo año.
Montoro, junto con los secretarios de Estado de Hacienda, Miguel Ferre; de Presupuestos, Marta Fernández Currás; y de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, harán entrega al presidente de la Cámara Baja, Jesús Posada, del contenido de los presupuestos en un lápiz de memoria.
Posteriormente, los máximos responsables de Hacienda ofrecerán la habitual conferencia de prensa en la que explicarán con detalle las cuentas de 2015, después de la somera presentación acontecida el pasado viernes tras el Consejo de Ministros.
Según el calendario previsto, el 1 y el 2 de octubre se celebrarán en el Congreso comparecencias sobre presupuestos; del 21 al 23 de octubre habrá debate de totalidad; del 4 al 6 de noviembre se debatirá en comisión el dictamen del proyecto; del 11 al 13 irá a pleno; y del 16 al 18 de diciembre se producirá la aprobación final.
En el periodo que transcurre entre el debate en pleno del dictamen y la aprobación definitiva (de mediados de noviembre a mediados de diciembre) el proyecto pasa al Senado, donde será sometido a las mismas fases de tramitación.
Los presupuestos de 2015 tendrán un límite de gasto no financiero de 129.060 millones de euros, lo que representa una caída del 3,2 % respecto a los de 2014.
Para el próximo año se establece un objetivo de estabilidad presupuestaria en el conjunto de las administraciones públicas con un déficit máximo del 4,2 % del PIB, que corresponde un 2,9 % a la Administración central, un 0,7 % a las comunidades autónomas y un 0,6 % a la Seguridad Social, mientras que las corporaciones locales deben liquidar sus presupuestos en equilibrio.
Los ingresos tributarios crecerán el 3,5 % en 2015 (primer año de la reforma fiscal) respecto a los presupuestados en 2014, hasta llegar a los 186.111 millones de euros, con descensos en los ingresos en IRPF (0,3 %) y en impuestos especiales (un 2,7 %) y aumentos en IVA (9,9 %) y Sociedades (5,6 %).
Las cuentas para 2015 incorporan las inversiones para el Plan Crece, que pretende apoyar e impulsar el crecimiento económico de la forma más eficiente posible.
Asimismo, recogen las medidas fiscales aprobadas por el Gobierno con el objetivo de incrementar el nivel de renta de las familias, algo que, según el Ejecutivo, servirá para dinamizar el consumo interno y las tasas de ahorro.
El gasto del conjunto de los ministerios disminuirá el 0,2 % el próximo año hasta alcanzar los 34.526 millones de euros una vez excluidas las aportaciones a la Seguridad Social, el Servicio Público de Empleo y Fogasa y las aportaciones al sistema eléctrico, y sin computar el impacto en el presupuesto de gastos del plan Crece.