El recién proclamado secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha llamado este sábado a los españoles a «escuchar», «atender» y «observar» a los socialistas, convencido de que cuando lo hagan volverán a confiar en la «enorme palanca de transformación que representa» su partido para «cambiar España».
«Voy a pedir que escuchen lo que decimos, que atiendan a lo que proponemos y que observen lo que hacemos, cuando hagan eso volveremos a recuperar la confianza de los españoles y haremos que cambie el país», ha prometido Sánchez en su primer discurso tras ser proclamado secretario general en el congreso federal extraordinario del PSOE.
Ante unos 3.000 asistentes al cónclave, el líder socialista ha reivindicado al PSOE como el partido de la «izquierda que cambia España», el que «ganará a la derecha» y el que hará un país «más justo igualitario y solidario».
Para ello ha llamado a los suyos a «apretar el paso», porque hay «millones de personas que necesitan un PSOE renovado», que no se «conforma con protestar».
«Con esa convicción me presenté, porque cambiando el PSOE empezamos a cambiar España y ya hemos dado el paso decisivo», ha aseverado.
En su intervención, Sánchez ha renovado su compromiso de ser un secretario general que esté «poco en Ferraz y mucho en los territorios con los militantes de base» y ha prometido que no le va a «temblar el pulso al echar del partido a un corrupto», en su idea de instaurar la «honradez intransigente».
Tras insistir en que la gente pide a los socialistas que estén «más en la calle» y que piensen «más en sus problemas», ha exigido a los presentes que empiecen a «hablar más de los españoles y lo justo del PSOE».
«Hoy no empieza todo, pero empiezan muchas cosas», ha señalado Sánchez, tras unas palabras de reconocimiento a la «dedicación» y el «compromiso» de su predecesor, Alfredo Pérez Rubalcaba, de quien ha dicho que ha hecho un «gran servicio al país y al partido en un momento muy complicado"
«Formas parte de lo mejor del socialismo en España y vas a formar parte de los mejor del socialismo en España», ha afirmado Sánchez dirigiéndose a Rubalcaba entre aplausos de los delegados.
También ha tenido palabras de agradecimiento a las «mareas ciudadanas que inundan las calles por precisamente defender lo que hemos construido los socialistas».
A los delegados que han ratificado la elección que hicieron los militantes el pasado 13 de julio de Sánchez como secretario general, les ha dicho que han «refrendado el cambio de abajo a arriba que necesita el PSOE» y por el que apostaron «con fuerza» los afiliados.
Ante los delegados e invitados al congreso se ha comprometido asimismo a devolver el protagonismo a los militantes de base, a rendir cuentas una vez al año ante ellos en todos los territorios, a abrir las agrupaciones y a celebrar asambleas abiertas.
«Quiero un partido socialista que responda con el mismo pulso que tiene ahora España; la sociedad española ya no va a aceptar un partido que no sea plenamente democrático y voy a dedicar todo mi esfuerzo a devolver la esperanza al país», ha proclamado el nuevo líder del PSOE, convencido de que «entre todos» podrán conseguir una «mayoría social de progreso que ponga fin a los gobiernos de la derecha».
En su discurso, ha propuesto a los militantes «dejar de contar los votos» que pierde el PSOE y empezar a contar los que van a recuperar «siendo fieles» a sus principios y valores: la «igualdad», la «justicia social» y la «libertad».