Felipe VI relevará esta semana al jefe de la Casa del Rey, el veterano diplomático Rafael Spottorno, en el primero de los cambios que introducirá en el órgano que le sirve de apoyo en el desempeño de sus funciones constitucionales, han informado fuentes del Palacio de la Zarzuela.
Spottorno dirige la Casa del Rey desde septiembre de 2011, apenas dos meses antes de que adquiriese notoriedad pública la investigación judicial en torno a los negocios de Iñaki Urdangarin con el registro judicial de las sedes de varias empresas vinculadas a él y a su socio Diego Torres. El diplomático es un viejo conocido de la institución, donde trabajó como secretario general entre 1993 y 2002.
A él le ha tocado lidiar con todo el 'caso Nóos', cuyo largo sumario ha llegado a calificar de «martirio», por las continuas informaciones que en los medios de publicación se han publicado en los últimos tres años. Y él fue también quien, en una reunión con la prensa en diciembre de ese mismo año, anunció que Urdangarin quedaba apartado de la agenda de la Familia Real por su comportamiento «no ejemplar».
En aquel encuentro Spottorno también dejó entrever que la Casa no iba a contar tampoco con la Infanta Cristina, aunque en su caso, solo respondió con un «ya veremos» cuando los periodistas le preguntaron si la hija menor del monarca seguiría participando de la agenda oficial. Lo cierto es que desde ese mismo momento ella también quedó apartada de facto de los actos oficiales.
A Spottorno también le ha tocado preparar la transición que ha culminado con la abdicación del Rey Juan Carlos I y la proclamación de Felipe VI que, según fuentes de la Casa, se ha hecho «con la dignidad» que se merece un país como España.
Jaime Alfonsín, un jefe discreto
A Spottorno le relevará el abogado del Estado Jaime Alfonsín,¿quien ha trabajado los últimos 20 años en la institución, al frente de la Secretaría del Príncipe de Asturias, por lo que es un hombre de su absoluta confianza.
Nacido en Lugo en 1956, renunció a una prometedora carrera en la empresa privada para dirigir en 1995 una secretaría de nueva creación dentro de la Casa del Rey que se encargaría de organizar las actividades del Príncipe de Asturias, a partir del momento en que el Heredero de la Corona regresó a Madrid tras haber completado su formación con un máster en relaciones internacionales por la Universidad de Georgetown (EEUU).
Justo antes de incorporarse al equipo de la Casa del Rey, Alfonsín trabajaba en el prestigioso despacho de abogados Uría y Menéndez, y antes, fue secretario general y director de la Asesoría Jurídica del banco Barclays. De haberse mantenido en la empresa privada, Alfonsín tendría un sueldo mucho más alto que el que recibe como alto cargo de la Casa del Rey, señalan en su entorno.
Los periodistas que han tratado con Alfonsín han podido comprobar que se trata de un hombre extremadamente prudente y discreto, mientras que personas que han trabajado con él le definen además como un hombre eficaz, tranquilo y reflexivo.
Una vez nombrado, corresponderá a Alfonsín completar el resto del equipo de la Casa del Rey, en el que se incluye al jefe de prensa, que es en la actualidad el periodista Javier Ayuso, que ha ejercido su función con gran profesionalidad en los tiempos más difíciles por los que ha pasado la monarquía, según coinciden en señalar los medios de comunicación que trabajan habitualmente con la institución.
Con respecto al sucesor de Ayuso, son varias las quinielas pero el candidato que parece mejor situado es el periodista Jordi Gutiérrez, que trabajó durante 16 años (1993-2009) como número dos en el departamento de prensa de la Casa Real, donde se ocupaba principalmente de las actividades de los Príncipes de Asturias. En la actualidad, es director de comunicación en la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM).
Alfonsín tendrá que decidir también si cesa al secretario de las Infantas Doña Elena y Doña Cristina, que han dejado de ser miembros de la Familia Real. García Revenga también está imputado en el 'caso Nóos' junto a Urdangarin y su esposa.
Está por ver si la estructura de la Casa del Rey se adelgaza o no como consecuencia de la nueva composición de la Familia Real. Debido a la juventud de la Princesa de Asturias, no parece que tenga mucho sentido el mantenimiento de una Secretaría para ella.