La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este viernes que el Ejecutivo analizará «si es pertinente» reforzar el Código Penal para perseguir los insultos, amenazas y apología de los asesinatos, aunque ha considerado que «ya hoy las leyes españolas dan una respuesta» a estos delitos.
En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta ha respondido así a cuatro preguntas sobre la posibilidad de reforzar la persecución de ese tipo de conductas después de los insultos, amenazas y frases instando al asesinato que se han vertido en las redes sociales tras la muerte a tiros de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco.
Precisamente, la Guardia Civil y la Policía Nacional han imputado a dos jóvenes de 19 años, uno en la provincia de Valencia y otro en la de Cádiz, por colgar en Internet canciones y frases insultantes y vejatorias relacionadas con la fallecida y con los políticos.
Sáenz de Santamaría ha aprovechado para expresar su agradecimiento al pueblo leonés por su comportamiento, apoyo y solidaridad manifestados tras el asesinato de Carrasco, por el que ya están en prisión dos mujeres -madre e hija- por su presunta participación.
En su primera respuesta, la vicepresidenta ha querido dejar claro que «ya hay mecanismos legales y judiciales para poder reaccionar a esas conductas» que el Código Penal ya tipifica como delitos independientemente del medio donde se cometan.
«Son ya delitos, ya están penados y se trata de aplicar esas normas», ha enfatizado Sáenz de Santamaría, quien ha insistido en que estas conductas son graves en sí mismas, pero además su «publicidad y eficacia es mayor cuando se usan redes sociales con mucho nivel de penetración».
A juicio del Gobierno, de las fuerzas de seguridad y de los tribunales, «hay base como para reaccionar ante delitos de esta naturaleza, que son graves y merecen condena», ha subrayado.
De todos modos, el Ejecutivo estudiará la posibilidad de reforzar ese marco legal y, de acordarlo así, uno de los instrumentos podría ser la reforma del Código Penal que se tramita ya en las Cortes, con todos los grupos y de la forma más consensuada.
Y ha reiterado: «Lo importante es que son delitos ya tipificados y tienen gravedad con independencia del medio elegido» para cometerlos.
Al ser preguntada de nuevo por este asunto, Sáenz de Santamaría ha señalado que primero hay que ver «si es pertinente» reforzar el Código Penal de acuerdo con la situación actual, porque «ya hay una repuesta penal a comportamientos de esta naturaleza».
Se trata de evaluar primero si es necesario ese reforzamiento y si luego se lleva a los grupos con las enmiendas pertinentes a la reforma del Código Penal, ha añadido la vicepresidenta antes de volver a recordar que en la actualidad las leyes, como demuestra la intervención de los tribunales, dan ya una respuesta a esas conductas.
Ha dicho también España es una democracia consolidada y hay libertad de expresión, un derecho reconocido que, «como todo, tiene sus límites», lo que establece el Código Penal.
«Lo que no es admisible ni comprensible en el mundo 'real', tampoco lo es en el virtual», ha resaltado la vicepresidenta.
Preguntada si las fuerzas de seguridad han cambiado de estrategia tras los insultos vertidos en las redes con motivo del suceso de León, la vicepresidenta ha asegurado que lo que se ha visto en la red estos días ha sido «muy grave» y ha recordado que la Policía y la Guardia Civil «están para cumplir y hacer cumplir las leyes». «Y es lo que están haciendo», ha concluido.
Con relación a este tema, el pasado miércoles el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, dijo que su departamento y el Ministerio de Justicia van a estudiar conjuntamente cómo «poner coto» a ciertas expresiones que incitan al odio o hacen apología del delito en las redes sociales, desde el respeto a la libertad de expresión.